La Seguridad Social ha lanzado una ayuda importante destinada a combatir la pobreza infantil: el Complemento de Ayuda a la Infancia (CAPI). Este complemento está vinculado al Ingreso Mínimo Vital (IMV), pero puede solicitarse de manera independiente. Está diseñado para ayudar a las familias con menores a cargo y que viven en situación de vulnerabilidad económica.
¿Qué es el Complemento de Ayuda a la Infancia?
El CAPI es una ayuda mensual que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los menores que viven en familias con bajos ingresos. Aunque está asociado al IMV, las familias que no sean beneficiarias del IMV también pueden solicitarlo si cumplen con los requisitos. El CAPI está destinado a proporcionar un apoyo adicional a las familias con hijos que enfrentan dificultades económicas.
Para acceder al CAPI, las familias deben cumplir una serie de requisitos. Deben tener al menos un menor a su cargo, y sus ingresos no pueden superar el 300% del umbral de renta establecido para el IMV. Además, el patrimonio de la familia debe ser inferior al 150% del límite fijado por la Seguridad Social.
El complemento puede solicitarse sin necesidad de ser beneficiario del IMV, lo que amplía su alcance. Esta ayuda está diseñada para mantenerse mientras se mantenga la situación de vulnerabilidad económica.
¿Cuánto reciben los beneficiarios?
El monto del CAPI varía según la edad del menor a cargo:
- 115 euros mensuales para menores de 3 años.
- 80,5 euros mensuales para menores entre 3 y 6 años.
- 57,5 euros mensuales para menores entre 6 y 18 años.
Esto significa que las familias pueden recibir hasta 1.400 euros al año por cada menor de 3 años, lo que supone una ayuda importante para cubrir necesidades básicas.
La solicitud del CAPI puede realizarse de forma telemática a través del portal web de la Seguridad Social o presencialmente en las oficinas del INSS. Antes de presentar la solicitud, se puede utilizar un simulador online para comprobar si se cumplen los requisitos.