El Comité de Finanzas del Senado de Estados Unidos ha presentado esta semana sus propuestas fiscales, las cuales podrían significar un cambio crucial para la legislación fiscal en el país. Estos cambios se están considerando dentro del proyecto de ley de conciliación presupuestaria que actualmente está siendo discutido en el Congreso. La Cámara de Representantes aprobó su nueva versión del proyecto, conocido como HR 1, pero el Senado está trabajando en su propia versión que aún debe ser reconciliada.
Uno de los principales puntos de discusión entre ambas cámaras es la deducción estándar y cómo se aplicará en el futuro. El Senado ha propuesto un aumento significativo en la deducción estándar a partir del año fiscal 2026, lo que podría beneficiar a millones de contribuyentes a la SSA. Esta propuesta también incluye una exención fiscal para personas mayores, lo que podría tener un gran impacto en la población de 65 años o más.
El futuro de las deducciones fiscales, en el aire
El Senado ha planteado una nueva estructura para la deducción estándar que aumentaría considerablemente los beneficios para ciertos grupos de contribuyentes. A partir de 2026, la deducción estándar se fijaría en $16,000 para los contribuyentes solteros, $24,000 para los jefes de familia, y $32,000 para parejas casadas que presenten una declaración conjunta. Esta propuesta sería permanente, con ajustes por inflación en los años siguientes.
Una de las novedades más destacadas es la inclusión de una deducción fiscal temporal para los estadounidenses mayores de 65 años. Mientras que la Cámara de Representantes había propuesto un bono de $4,000, el Senado eleva esta cifra a $6,000. Sin embargo, esta deducción para mayores comenzaría a eliminarse gradualmente a partir de ciertos límites de ingresos, lo que plantea una gran diferencia respecto a la propuesta de la Cámara.
Posibles retos y negociaciones pendientes
A pesar de estas propuestas optimistas, expertos como Ted Sarenski advierten que, cuando la deducción para mayores comience a desaparecer en el 2028, podrían surgir tensiones y protestas. Las preocupaciones aumentan cuando se analiza el impacto del límite de la deducción de impuestos estatales y locales (SALT), que actualmente está fijado en $10,000. El Senado sugiere mantener este límite, mientras que la Cámara de Representantes aboga por un aumento de hasta $40,000 por cada hogar, lo que podría generar conflictos adicionales.
Sarenski también señala que este desacuerdo sobre SALT podría ser determinante para el éxito del proyecto de ley. Los residentes de estados con altos impuestos, como California y Nueva York, podrían verse muy afectados por la falta de un acuerdo en este punto. De este modo, aunque el Senado ha propuesto una posición firme, se espera que las negociaciones continúen y que finalmente se llegue a un compromiso entre ambas cámaras.