La Seguridad Social hace entrega de una serie de pensiones indispensables para muchos ciudadanos. La más conocida es la de jubilación, que abarca a toda la población que ya ha puesto fin a su vida laboral. En 2024, la edad ordinaria para jubilarse es de 66 años y 6 meses si has cotizado menos de 38 años.
Si la cotización supera los 38 años, es posible jubilarse a los 65 años. No obstante, para obtener el 100% de la pensión se deberá haber cotizado 36 años y 6 meses.
Asimismo, el gasto en pensiones es cada vez más elevado. Según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, se destinan 9.288 millones de euros en este apartado, y hay cerca 6,5 millones de beneficiarios cada mes. Este 2024, además, ha habido una revalorización y la pensión media ha subido un 5% respecto al año anterior.
La paga de más de 6.300 euros que recibirán muchos pensionistas en junio
Dicho esto, la Seguridad Social ha anunciado que, en el próximo mes de junio, muchos pensionistas recibirán una paga extra que puede alcanzar hasta los 6.350 euros. La pensión de jubilación es contributiva, ya que se considera un rendimiento del trabajo para tributar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Se entrega en 14 pagas anuales y, por lo tanto, hay dos mensualidades adicionales, que se abonan en junio y en diciembre.
La paga extra de junio corresponde del devengo mensual de las pensiones durante los primeros seis meses del año, concretamente del 1 de diciembre al 31 de mayo del año siguiente. En 2024, la pensión máxima en España es de 3.175 euros. Juntando el dinero de junio y el dinero adicional, habrá pensionistas que podrán ganar más de 6.300 euros.
La pensión de jubilación del mes de junio se cobrará a partir del martes 25, sin retrasos al no ser un día festivo.
Esta paga extra supone una gran noticia para los jubilados antes de llegar al verano. Con este dinero, algunos de ellos podrán disfrutar de unas buenas vacaciones o hacer compras que, habitualmente, no serían asumibles.
El Gobierno ha revalorizado las pensiones conforme al Índice de precios al consumidor (IPC) para que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo. No obstante, se prevé un número más alto de beneficiarios a partir de 2025, y el aumento de la esperanza de vida pone la sostenibilidad del sistema en una situación complicada.