A partir del 1 de noviembre de 2024, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) implementará cambios significativos en el régimen de subsidios por desempleo. Con la entrada en vigor del Real Decreto-ley 2/2024, algunos subsidios desaparecerán, y otros se mantendrán, pero con modificaciones importantes.
Esta reforma afecta tanto a quienes están cobrando actualmente estas ayudas como a los futuros beneficiarios. Por lo tanto, es fundamental estar al tanto de los cambios para evitar problemas con el cobro de estas prestaciones.
¿Qué subsidios se mantendrán, según el SEPE?
El SEPE ha confirmado que, tras la reforma, solo se mantendrán dos subsidios específicos:
- Subsidio para mayores de 52 años. Este subsidio está destinado a aquellos que han agotado la prestación contributiva y que cumplen con los requisitos de edad y cotización. Además, cotizará para la jubilación mientras se reciba el subsidio, lo que lo hace crucial para muchas personas en esta edad.
- Subsidio por insuficiencia de cotización. Este subsidio es para aquellos que, habiendo cotizado, no han alcanzado el mínimo exigido para acceder a la prestación contributiva por desempleo.
Estos dos subsidios son claves en la reforma, ya que reemplazarán muchas otras ayudas que serán eliminadas.
Subsidios que desaparecerán según el SEPE
Entre los subsidios que desaparecerán a partir del 1 de noviembre están:
- Renta Activa de Inserción (RAI).
- Subsidio Extraordinario por Desempleo (SED).
- Ayuda familiar y subsidios destinados a mayores de 45 años, entre otros.
Estas personas pasarán a depender del Ingreso Mínimo Vital (IMV), aunque quienes ya estaban recibiendo estas ayudas seguirán cobrándolas hasta agotarlas.
Cambios en las cuantías y duración de las ayudas
Otra novedad de la reforma es la modificación de las cuantías. Los beneficiarios recibirán 570 euros mensuales durante los primeros seis meses, cantidad que se reducirá a 540 euros durante los siguientes seis meses y a 480 euros el resto del período. La duración del subsidio dependerá de la edad del solicitante y de si tiene responsabilidades familiares.
El SEPE ha establecido requisitos estrictos para mantener el subsidio. Los beneficiarios deberán seguir demostrando que cumplen con las condiciones de acceso, como la carencia de rentas y la inscripción como demandantes de empleo. No cumplir con estas obligaciones podría provocar la suspensión o extinción del subsidio