Enviar cartas parece que se ha quedado en algo del pasado. Sin embargo, al igual que sucede con el uso del dinero en efectivo, comprar sellos de Correos sigue siendo algo muy habitual en ciertos sectores.
Para todos los que necesitan adquirir este elemento primordial para enviar misivas, el 2024 ha comenzado con una noticia nada alentadora: las tarifas de Correos, como ha sucedido con muchos otros productos, han subido.
Correos sube sus tarifas en este 2024
Parece que la inflación llega a todo tipo de sectores. Así lo demuestran desde Correos con los sellos. El organismo ha anunciado que, desde el pasado 1 de enero de 2024, el precio para enviar una carta nacional ordinaria ha subido 4 céntimos.
Así, la tarifa se sitúa en 0,82 euros en lugar de los 0,78 euros que costaba hace tan solo unos días. Esto supone una subida del 5,1% en el producto más utilizado.
Desde Correos han explicado que el objetivo de la subida del precio de los sellos para el envío de cartas y tarjetas postales nacionales, con un peso de hasta 20 gramos, es de conseguir “una progresiva adecuación” a costes. También para mantener la calidad y la eficiencia del servicio postal.
Otros productos de Correos que han subido este año
Por otro lado, en Correos también ha habido otras subidas relacionadas con las cartas y tarjetas postales internacionales en la categoría de ordinarias y de hasta 20 gramos. En este caso, el envío costará 1,70 euros cuando en 2023 costaba 1,65.
Este precio se mantendrá siempre y cuando el destino sea Europa. También se incluyen destinos como Groenlandia. Sin embargo, se excluyen países como Albania, Armenia, Chipre, Bosnia, Malta, Georgia, Rusia y Moldavia.
Cabe destacar que la tarifa se mantiene en el resto de los países. El franqueo para Australia, EE.UU., Canadá, Nueva Zelanda, Japón y Rusia es de 2,10 euros. Para el resto, la tarifa es de 1,75 euros.
Cómo establece Correos las nuevas tarifas
Desde Correos también han indicado que, para establecer estas nuevas tarifas, se ha basado en la Ley Postal. El mecanismo descrito consiste en que el organismo, como operador elegido por el Estado para prestar el servicio postal, debe comunicar todas las subidas en sus tarifas.
Además, debe hacerlo con al menos 3 meses de antelación y dirigir el comunicado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Este se encarga de comprobar que desde Correos respetan el principio de que la tarifa sea asequible para todos.