El Atlético de Madrid no pierde el tiempo en este mercado de fichajes. Con la salida inminente de Ángel Correa rumbo a México, el club colchonero ha intensificado las gestiones para encontrar un recambio de garantías en el frente de ataque. Y ahí entra en escena un nombre que seduce por su físico, su edad y su presente: Lorenzo Lucca.
El delantero que gusta
El delantero del Udinese ha sido uno de los goleadores más llamativos de la pasada Serie A. A sus 24 años, y con 2,01 metros de altura, firmó 14 goles y repartió 2 asistencias en 36 partidos. Su rendimiento le ha valido para entrar en el radar de varios clubes europeos, y el Atlético de Madrid ya ha iniciado contactos preliminares con el conjunto italiano.

El interés no es casual. Lucca representa un perfil que el Atlético no tiene: un ariete de gran envergadura, con juego aéreo dominante y presencia en el área rival. Su fichaje complementaría de forma ideal a un futbolista como Julián Álvarez, que también gusta mucho en las oficinas del Metropolitano. Juntos, podrían formar una pareja de ataque con equilibrio entre potencia, movilidad y gol.
El Nápoles está muy interesado
La operación no será sencilla. El Nápoles parte con ventaja en esta carrera y ya ha avanzado conversaciones serias con el Udinese. El precio del traspaso podría rondar los 30 millones de euros, cifra que el club napolitano está dispuesto a poner sobre la mesa en breve. En cambio, el Atlético ha pedido tiempo para evaluar su margen financiero, a la espera de cerrar algunas salidas.
A favor del equipo madrileño juega el creciente interés de Diego Simeone en reforzar su delantera con perfiles complementarios. Ya no se busca solo un segundo punta o un extremo reconvertido, sino un delantero de área capaz de fijar centrales y generar espacios. Lucca encaja perfectamente en esa idea. Además, su proyección y experiencia en la Serie A le hacen un candidato interesante para competir en LaLiga y en Europa.
Desde Italia se informa de una inminente reunión entre Udinese y Nápoles, que podría acelerar las cosas. Pero el Atlético de Madrid no ha dicho su última palabra. Carlos Bucero, como ya hiciera con otros movimientos recientes, está atento por si se abre una oportunidad de mercado de última hora.