El Atlético de Madrid sigue muy atento a los movimientos del mercado de fichajes. El club colchonero ha recibido una inesperada buena noticia en su objetivo más ambicioso: Viktor Gyokeres. La ofensiva del Arsenal por Benjamin Sesko podría dejar el camino libre para que los rojiblancos sueñen con el delantero sueco.
Contactos oficiales entre el Arsenal y el delantero del Leipzig
El Arsenal ha sido el gran protagonista en las últimas horas. Los ‘gunners’ han iniciado contactos formales con el RB Leipzig para cerrar la incorporación de Sesko, uno de los delanteros jóvenes más prometedores de Europa. Según el periodista Florian Plettenberg, el club londinense es el único que ha entrado de lleno en la negociación, lo que descarta casi por completo su interés en Gyokeres.

Esto representa una noticia positiva para el Atlético de Madrid. Carlos Bucero y su equipo de planificación deportiva llevan meses siguiendo de cerca a Gyokeres, que ha brillado esta temporada en el Sporting de Portugal. Sus cifras goleadoras y su estilo encajan a la perfección con lo que busca Diego Simeone para su nuevo proyecto.
La oportunidad del Atlético de Madrid
La operación, sin embargo, no es sencilla. La cláusula de rescisión de Gyokeres ronda los 70 millones de euros, una cantidad fuera del alcance del Atlético en condiciones normales. Pero la situación podría cambiar si el club logra cerrar algunas ventas clave y equilibrar cuentas. Además, el deseo del jugador de dar un salto competitivo podría jugar a favor.
Con el Arsenal centrado exclusivamente en Sesko, el número de competidores por Gyokeres se reduce. Esto no significa que el Atlético tenga vía libre, pero sí que puede negociar sin la presión de una guerra de ofertas con los gigantes de la Premier League. Un escenario muy diferente al de semanas anteriores.
La prioridad del Atlético de Madrid es reforzar su delantera de cara al Mundial de Clubes. El cuerpo técnico quiere un ariete potente, que asegure goles y profundidad. Gyokeres se mantiene como la primera opción, por delante de otras alternativas menos contrastadas. Su nombre está subrayado en rojo en la agenda de la dirección deportiva.