El Atlético de Madrid sigue siendo protagonista en el mercado de fichajes, aunque no siempre por las operaciones que cierra. En esta ocasión, el club rojiblanco estuvo muy cerca de dar un golpe importante incorporando a un futbolista con pasado en sus categorías inferiores. Sin embargo, tras valorar su llegada, la dirección deportiva decidió dar un paso atrás y no seguir adelante con la operación.
El Atleti rechazó su llegada
La información, publicada por el Manchester Evening News, señala que se trataba de un movimiento que generaba expectación tanto por el perfil del jugador como por su historia en el club. Finalmente, el Atlético optó por otras alternativas para reforzar el ataque, dejando en claro que el contexto actual no hacía viable su fichaje.
Hablamos de Garnacho, atacante argentino que milita en la Premier League y que había sido ofrecido a varios equipos europeos este verano. Arsenal y Tottenham también hicieron sus deberes, analizando su posible incorporación antes de buscar otras opciones. En el caso del Atlético, el jugador estuvo sobre la mesa, pero el club ya había avanzado en negociaciones para cerrar a Alex Baena, extremo procedente del Villarreal.
No cuentan con él en Manchester
Según la citada fuente, Garnacho contaba con el visto bueno para salir del Manchester United. Rubén Amorim le comunicó en mayo que no tendría un rol protagonista en la nueva temporada. La relación entre técnico y jugador se había enfriado tras la final de la Europa League, donde el argentino perdió la titularidad y su futuro quedó en entredicho.
El Atlético de Madrid, que conocía de primera mano el talento del futbolista por su etapa formativa en el club, llegó a estudiar incluso un posible contrato. No obstante, las prioridades deportivas y económicas cambiaron. La llegada de Baena y el plan de Simeone para el ataque hicieron que la operación quedara descartada de forma definitiva.
Para Garnacho, la puerta del Atlético se cierra por ahora, aunque su situación sigue atrayendo a otros clubes. Con solo 22 años, es un extremo con proyección, velocidad y desborde, cualidades que encajan en cualquier equipo que busque dinamismo ofensivo. El tiempo dirá si en el futuro ambos caminos vuelven a cruzarse.