El Atlético de Madrid ha comenzado a mover ficha pensando en el relevo generacional de una de sus grandes leyendas: Jan Oblak. El guardameta esloveno, que ha sido pilar del equipo desde 2014, sigue rindiendo a un nivel notable, pero en los despachos del Metropolitano ya miran al futuro. Y el nombre que suena con más fuerza es el de Leo Román.
Necesidad de un portero de nivel
El portero del Mallorca, de 24 años, se ha convertido en el objetivo prioritario del club rojiblanco para reforzar una portería que hasta ahora ha tenido dueño indiscutible. Aunque Oblak tiene contrato hasta 2028, en el club no ignoran que el tiempo pasa, que el esloveno ya tiene 32 años y que podría llegar el momento de un cambio.

Leo Román, criado en Ibiza, es considerado una de las joyas del futuro en la portería española. No es titular habitual en el Mallorca, pero sus actuaciones en partidos clave, como contra el Madrid o el Barcelona, lo han catapultado al radar de los grandes. El Atlético de Madrid no ha sido ajeno a este rendimiento y ha tomado una decisión clara: apostar por él como relevo a medio plazo de Jan Oblak.
Gusta mucho en el Atlético
La operación no será sencilla. Aunque su cláusula de rescisión ronda los diez millones de euros, el club balear podría dejarlo salir por una cifra cercana a los seis o siete. Un precio asumible para un jugador que tiene contrato hasta 2026 y que, según el entorno del Mallorca, no seguirá la próxima temporada. Además del Atlético de Madrid, varios clubes de la Liga, de Italia y de la Premier League también le siguen muy de cerca.
A pesar de que todavía no se han producido contactos formales, en el club madrileño ya preparan el terreno. La idea es cerrar el fichaje de Leo Román cuanto antes para incorporarlo este verano, ya sea como tercer portero o para cederlo y que siga acumulando minutos. El pasado curso, su rendimiento en el Real Oviedo fue sobresaliente y demostró que está listo para un desafío mayor.
El Atlético de Madrid no solo ve en Leo Román una promesa, sino un proyecto real de futuro. Su llegada sería la confirmación de que el club ya está pensando en lo que viene después de Jan Oblak. La transición será progresiva, pero el relevo ya está en marcha.