El Atlético de Madrid ha comenzado a mover fichas de cara a la próxima temporada. Tras un curso irregular y lejos de las expectativas, el club rojiblanco prepara una reestructuración profunda en su plantilla. Y uno de los focos está claro: reforzar el ataque con un perfil top.
El delantero que vuelve a escena
Aunque en las últimas semanas sonaba con fuerza el nombre de Viktor Gyokeres, ahora el Atlético parece haber cambiado de rumbo. La dirección deportiva y el propio Diego Simeone han puesto sus ojos en un delantero contrastado: Dusan Vlahovic. El serbio, actualmente en la Juventus, es la nueva prioridad ofensiva.

La opción de Vlahovic gana fuerza por varios motivos. El delantero tiene contrato hasta 2026, pero su renovación con la Juve está totalmente estancada. En Turín no quieren perderle gratis, y eso abre la puerta a un traspaso este verano. Desde Italia apuntan a un precio de salida en torno a los 40 millones de euros, cifra asumible para el Atlético si se producen ventas.
Salidas sonadas
En el Metropolitano se espera movimiento. La salida de Ángel Correa es prácticamente un hecho y Griezmann tampoco tiene asegurada su continuidad. Simeone necesita un goleador con potencia, presencia física y olfato, cualidades que Vlahovic reúne de sobra. A sus 25 años, acumula experiencia en la élite europea y hambre por recuperar protagonismo.
Esta temporada, el ariete serbio ha disputado 39 partidos con la Juventus, marcando 14 goles y dando cinco asistencias. Números sólidos, aunque por debajo de las expectativas generadas tras su fichaje. Aún así, su potencial no se discute y el Atlético quiere aprovechar la oportunidad.
Gusta en el cuerpo técnico
Simeone considera que Vlahovic se adapta perfectamente a su estilo de juego. Lucha, presión alta, remate, juego directo y capacidad para definir en el área. El técnico argentino cree que puede relanzar la carrera del delantero, que busca un nuevo reto en una liga más abierta y ofensiva.

El interés del Atlético de Madrid por Vlahovic no es nuevo, pero las circunstancias actuales han alineado las posibilidades. Si el club logra cerrar salidas clave, la inversión por el delantero serbio se convierte en prioritaria. Y con Gyokeres cada vez más lejos, la apuesta rojiblanca ya tiene nombre y apellido.