El Atlético de Madrid ha cerrado una operación clave para potenciar su banda izquierda y darle al internacional español un socio de garantías. El club colchonero, siempre atento al mercado, ha tomado una decisión estratégica tras valorar diferentes perfiles para esa demarcación. La idea de Diego Pablo Simeone es clara: reforzar el equipo con talento joven, proyección y compromiso táctico.
La dirección deportiva ha puesto el foco en futbolistas con recorrido en ligas competitivas. Tras el análisis de varios candidatos, el club rojiblanco ha optado por un perfil que encaja tanto en defensa como en transiciones ofensivas. Se busca amplitud, profundidad y una conexión fluida por el costado zurdo que potencie el rendimiento de los interiores.

El elegido para reforzar ese costado no es otro que Matteo Ruggeri, el lateral italiano, de 22 años, aterriza en Madrid con la intención de jugar tras un año complicado. Pese a que comenzó como titular en la Atalanta, terminó perdiendo protagonismo frente a Davide Zappacosta. Además, su participación con la selección sub21 se vio truncada con la eliminación frente a Alemania en el Europeo.
20 millones de inversión
El fichaje se cierra en torno a los 17 millones de euros, más tres en variables, una operación que demuestra la apuesta firme del club por su perfil. Ruggeri ha sido seguido de cerca por los ojeadores del Atlético, que valoran su despliegue físico, capacidad de centro y lectura táctica. A sus 22 años, ya suma experiencia en Serie A y competiciones europeas.
La noticia supone una excelente señal para Álex Baena, que ya deslumbró la pasada temporada con su visión y llegada. La intención del cuerpo técnico es ofrecerle más libertad por dentro, sabiendo que tendrá un respaldo fiable por fuera. El Atlético se mueve con inteligencia, pensando en el colectivo y en el crecimiento de sus piezas jóvenes.
Socio para Baena
Enrique Cerezo y Miguel Ángel Gil Marín han dado luz verde al acuerdo tras recibir el visto bueno de Simeone. La planificación está en plena ebullición y todo apunta a que no será la última incorporación. Se busca profundidad de plantilla, especialmente con la previsión de jugar Champions y Copa a alto nivel.
Con este movimiento, el Atlético se asegura un recurso valioso para competir en los dos laterales. Matteo Ruggeri llega con hambre y ganas de demostrar que puede ser importante en un contexto exigente como el Metropolitano. Además, su perfil encaja con el estilo vertical que el Cholo quiere recuperar esta temporada.
El entendimiento con Álex Baena podría ser inmediato, ambos comparten inteligencia en el movimiento, gusto por la combinación y compromiso defensivo. Ruggeri, aunque ofensivo, no descuida su labor atrás, lo cual permitirá al equipo ajustar su bloque sin perder equilibrio. Una sociedad que ilusiona a los aficionados rojiblancos.