El centro del campo del Real Madrid, a pesar de inversiones millonarias como las de Tchouaméni y Camavinga, sigue sin alcanzar la estabilidad esperada. Mientras tanto, el mediocampo del fútbol mundial ha coronado a un español como el mejor, y no es cualquier español. Rodri, de 28 años, se ha consolidado como el mediocentro ideal en el Manchester City de Guardiola y en la Selección Española, y ahora, ha ganado el Balón de Oro.
Ser el segundo español en la historia que gana este galardón, ha hecho que todas las miradas se centren en él. Esta hazaña no solo resalta su talento, sino que también pone en el radar al Real Madrid para hacerse con sus servicios. Además, su improtancia en el equipo de Pep Guardiola adquiere más valor cuando, sin él, los 'sky blues' cuatro derrotas seguidas en todas las competiciones.
Actualmente, Rodri tiene contrato con el Manchester City hasta 2027 y una oferta de renovación que, en términos salariales, lo colocaría al nivel de estrellas como Phil Foden y Erling Haaland. Sin embargo, el futuro de Rodri en el club inglés es incierto, pues el City enfrenta un juicio por posibles infracciones al Fair Play financiero, situación que podría afectar al proyecto. Además, Txiki Begiristain, el actual director deportivo, dejará su puesto, y la continuidad de Guardiola tampoco está garantizada, lo cual podría influir en la decisión de Rodri respecto a su futuro.
El Real Madrid está al acecho
El club blanco conoce bien el potencial de Rodri y la oportunidad que representa, especialmente al considerar su relación con uno de los capitanes del equipo, Dani Carvajal. Durante su discurso al recibir el Balón de Oro, Rodri hizo un guiño al lateral derecho madridista, una conexión que los seguidores del equipo blanco no han pasado por alto. Su cercanía con el vestuario del Real Madrid hace que muchos aficionados se pregunten por qué el conjunto blanco no ha considerado a Rodri como una opción antes.
La posible llegada de Rodri al Madrid no solo ayudaría a estabilizar el mediocampo, sino que añadiría un impacto de marketing significativo. El fichaje de un Balón de Oro supondría un golpe de efecto tanto en el ámbito deportivo como comercial. Un jugador de su calibre podría darle a Ancelotti la tranquilidad que busca en la mitad de la cancha y al Real Madrid un salto de calidad difícil de ignorar.
Así, Florentino Pérez está frente a una oportunidad única para resolver su crisis en el mediocampo de una sola tacada. Además, sería movimiento que, de producirse, dolería muchísimo a la afición del Atlético de Madrid que tanto le quiso durante el año que estuvo. Sería complicado para la hinchada rojiblanca asumir que un canterano colchonero y Balón de Oro, prefiere volver a Madrid al equipo rival.