El mercado de fichajes se calienta en torno a Carlos Martín, una de las grandes joyas de la cantera del Atlético de Madrid. Tras una temporada destacada en el Deportivo Alavés, el joven delantero ha despertado el interés de varios clubes de Primera División que lo quieren cedido para la 2025-26. Su futuro, sin embargo, dependerá de una decisión clave que debe tomar Diego Simeone.
Buena primera temporada en Primera División
Martín disputó 27 partidos oficiales con el Alavés, en los que acumuló más de 1.300 minutos y firmó 2 goles y 2 asistencias. Su impacto no se limitó a las cifras: aportó trabajo sin balón, versatilidad en ataque y madurez táctica. Un perfil muy valorado por los cuerpos técnicos que buscan talento joven con experiencia reciente en la élite.

Pese a su buen rendimiento, todo apunta a que Carlos Martín no entra en los planes inmediatos de Simeone. El canterano regresó al Metropolitano tras su cesión y formó parte del grupo que viajó a Estados Unidos para disputar el Mundial de Clubes. Sin embargo, no jugó ni un minuto en el torneo, lo que refleja su situación dentro del primer equipo.
Interés de muchos clubes
El club rojiblanco ya ha comunicado que está abierto a una nueva cesión para seguir potenciando su crecimiento. La lista de pretendientes no para de crecer: Rayo Vallecano, Mallorca, Espanyol, Getafe, Alavés y ahora también el recién ascendido Real Oviedo se han interesado formalmente. Todos buscan reforzar su línea ofensiva con un futbolista que combina formación de élite con experiencia reciente en la máxima categoría.
Simeone, por su parte, debe tomar una decisión estratégica. Aunque Carlos Martín ha demostrado estar listo para competir al más alto nivel, el ataque del Atlético de Madrid está cubierto por jugadores consolidados. La prioridad del técnico argentino es contar con futbolistas que puedan ofrecer rendimiento inmediato en todas las competiciones, algo que complica la continuidad del joven madrileño en la plantilla.
En los despachos del Atlético valoran muy positivamente su evolución. No se plantean una venta, salvo una oferta desorbitada, porque le consideran una pieza de futuro. El plan pasa por repetir el modelo del año pasado: una cesión a un equipo de Primera donde tenga continuidad, minutos y responsabilidad ofensiva.