En medio de la creciente polémica sobre la posibilidad de que algunos partidos de LALIGA se disputen en el extranjero, Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, ha levantado la voz. Se rumorea que el Barça - Atlético de Madrid del 21 de diciembre se jugará en Miami. Las declaraciones del presidente, como de costumbre, no tienen desperdicio.
Enrique Cerezo, conocido por su estilo directo y algo diplomático, se pronunció con un refrán que resume su postura: "Donde manda patrón, no manda marinero". Con esto, el presidente rojiblanco deja entrever que la decisión sobre si el partido se jugará en Estados Unidos depende únicamente de LALIGA. Asimismo, añadió que el Atlético de Madrid no ha sido informado oficialmente sobre la posibilidad de jugar en Miami: "Nosotros no sabemos nada del partido".
Una opción más que posible
Esta afirmación es significativa, ya que en los últimos años ha habido varios intentos por parte de LALIGA de llevar partidos fuera de España. Esto forma parte de una estrategia para globalizar la marca del fútbol español. Sin embargo, estas iniciativas han encontrado obstáculos, como la resistencia de la Real Federación Española de Fútbol y de los propios jugadores.
En 2019, Tebas intentó llevar un Girona - Barça y un Villarreal - Atlético de Madrid a EEUU, pero las demandas de la RFEF y la negativa de FIFA lo impidieron. Sin embargo, todo ha cambiado. En abril de este mismo año, la FIFA acordó con Relevent Sports la posibilidad de llevar partidos de Liga fuera del territorio nacional.
Cerezo, dispuesto a colaborar con Tebas
A pesar de la incertidumbre, Enrique Cerezo dejó claro que ellos estarían dispuestos a colaborar si jugar en EEUU fuera en beneficio del fútbol español. "Si es por bien del fútbol español, nosotros estamos encantados de colaborar". Este matiz refleja que los directivos del Atlético de Madrid no pondrán obstáculos a LALIGA, en un claro ejemplo más de poner el dinero por encima de todo.
El futuro de este posible partido en Miami sigue siendo incierto, pero las palabras de Cerezo muestran la postura abierta del Atlético de Madrid. En este caso, los damnificados principales serían los aficionados y jugadores culés que están haciendo de su casa un fortín esta temporada. Evidentemente, los jugadores del Atlético de Madrid también se verían afectados y, en menor medida, la afición rojiblanca que quería desplazarse a la ciudad condal.
En esta época en la que se habla tanto de calendario ajustado, lesiones graves por la carga de minutos y falta de tiempo para preparar los partidos, aún no es suficiente. La gente que manda en los organismos que rigen el fútbol sigue con esa necesidad imperiosa de seguir sacando leche a una vaca que está raquítica y que pide ayuda. Siguen buscándose soluciones para ganar más dinero y no para ofrecer un buen producto, y el fútbol está tocando techo a nivel económico.