El empate del Atlético de Madrid frente al Elche dejó más que un sabor amargo. En el Metropolitano, el sábado 23 de agosto, Diego Simeone terminó la jornada con una certeza: necesita un refuerzo en ataque. El equipo no logra traducir la posesión en ocasiones claras y eso lo mantiene lejos de los primeros puestos.
El técnico argentino busca un perfil muy concreto. Alguien que pueda desequilibrar con amagues, desbordes y creatividad en los metros finales. Esa carencia quedó en evidencia en las dos primeras fechas, donde el Atlético ya cedió cinco puntos valiosos en la pelea por LaLiga.
El deseo de Simeone y la voluntad de Nico
En ese contexto surgió el nombre de Nicolás González. El atacante argentino, con pasado en Fiorentina y presente en la Juventus, vuelve a estar vinculado al club rojiblanco. Desde el entorno del jugador hicieron llegar su interés a la directiva colchonera, convencidos de que trabajar con Simeone es una oportunidad única.
El delantero incluso está dispuesto a facilitar la operación. En Turín percibe un salario elevado, pero ya ha dejado claro que aceptaría una rebaja con tal de vestir la camiseta del Atlético. El paso final, entonces, depende de un acuerdo entre ambos clubes antes del cierre del mercado.
Si la negociación llega a buen puerto, Simeone sumaría una alternativa más a su frente de ataque. La plantilla ofensiva ya cuenta con nombres de peso como Julián Alvarez, Alexander Sorloth, Thiago Almada, Alex Baena, Giuliano Simeone, Antoine Griezmann y Giacomo Raspadori. La llegada de Nico reforzaría la rotación para una temporada exigente.
Los números en LaLiga y la presión sobre el club
La urgencia del fichaje está vinculada a los resultados. El Atlético cayó en el debut ante el Espanyol en Cornellá y luego no pasó del empate contra el Elche. Cinco puntos perdidos en apenas dos fechas generan un clima de preocupación en la afición.
Actualmente, el equipo ocupa posiciones lejos de la parte alta de la tabla. El siguiente reto será el sábado 30 de agosto frente al Deportivo Alavés en Mendizorroza, un duelo clave para recuperar confianza. Simeone sabe que cada tropiezo complica las aspiraciones de título.
Mientras tanto, en la Juventus también hay disposición a estudiar la salida del argentino. Su relación con Igor Tudor, técnico del club italiano, no atraviesa el mejor momento. Aun así, en Turín mantienen firme una condición: solo aceptarán negociar si la oferta supera los 30 millones de euros.
Matteo Moretto actualiza el mercado
El periodista italiano Matteo Moretto dio las últimas novedades sobre el caso. En sus palabras, la operación no depende solo de la Juventus. "El Atlético de Madrid está trabajando por todos los medios para gestionar la salida de alguno de los jugadores de la plantilla para poder fichar e inscribir a Nico González", aseguró.
Ese es el verdadero obstáculo ahora mismo. Antes de incorporar al argentino, el club colchonero necesita liberar espacio salarial y cumplir con los límites de LaLiga. Solo entonces podrá cerrar el acuerdo con los bianconeri.
Con el mercado a punto de cerrarse, los tiempos apremian. Simeone espera una solución que permita reforzar su delantera y enderezar el rumbo de una temporada que arrancó con dudas. El futuro de Nico González, por ahora, sigue en el aire.