En un momento delicado de la temporada, Paulo Futre ha querido alzar la voz para aportar perspectiva. El exjugador y leyenda del Atlético de Madrid escribió una columna en Mundo Deportivo donde analizó el bajón reciente del equipo. Su enfoque, más comprensivo que crítico, ha abierto una reflexión dentro del entorno rojiblanco.
Un bache durante el último mes
Futre no oculta que los últimos partidos del Atlético de Madrid han dejado un sabor agridulce. El empate ante el Alavés fue especialmente doloroso, pero más allá del resultado, lo que más preocupa es la sensación de desconexión. Para Futre, esa desconexión no es falta de compromiso, sino una reacción humana a la situación actual del equipo.

Con la clasificación para el próximo Mundial de Clubes asegurada, parte de la plantilla parece estar pensando más en ese desafío internacional que en el cierre de LaLiga. Futre lo dice con claridad: “Es natural que la mente empiece a proyectarse hacia el gran reto que nos espera”. No lo justifica, pero lo entiende.
Futre da las claves de los últimos resultados
El exfutbolista recuerda que no es fácil mantener la tensión competitiva cuando ya no hay títulos en juego. Y si incluso algunos aficionados están desconectando, como cuenta con el ejemplo de un amigo que no vio el partido ante el Alavés, también es lógico que algunos jugadores pierdan concentración. Simeone lo insinuó también tras el partido: el equipo no mostró jerarquía en un duelo que parecía sencillo.
En ese contexto, Futre llama a la calma y la confianza. Recuerda que el Atlético de Madrid siempre responde en los momentos clave. Quedan cuatro partidos para cerrar el curso con buenas sensaciones: Real Sociedad, Osasuna, Betis y Girona. Y para él, más allá de los puntos, lo importante es que el grupo llegue motivado al reto más importante del año.
El Mundial de Clubes supone una oportunidad histórica para el club. Han pasado cincuenta años desde que el Atlético de Madrid levantó la Copa Intercontinental. Futre cree que ahora toca preparar bien ese torneo, sin que ello signifique rendirse en LaLiga. Con su habitual pasión, el luso envía un mensaje de fe y apoyo.