La Selección Argentina vivió una noche especial en el Monumental, donde derrotó por 3-0 a Venezuela en un duelo cargado de simbolismo. Fue el último partido de Leo Messi en suelo argentino con la albiceleste, y cada minuto se vivió como una despedida anticipada. En ese escenario, un nombre brilló con fuerza y se llevó todos los elogios: Thiago Almada, jugador del Atlético de Madrid.
Un encuentro sobresaliente
El mediapunta rojiblanco firmó una actuación sobresaliente, confirmando el gran inicio de temporada que viene mostrando con el Atleti. Su participación decisiva llegó en el minuto 80, cuando asistió a Messi en su segundo gol de la noche. Un pase medido, preciso y cargado de visión que terminó desatando la ovación del estadio. Para muchos, fue la jugada que lo coloca en la primera fila de los herederos del ’10’.
La estadística respalda la sensación que dejó Almada en el Monumental. En 2025 ha participado directamente en goles en todos los partidos disputados con Argentina. Marcó contra Uruguay y Colombia, y dio asistencias frente a Brasil, Chile y Venezuela. Una continuidad que explica por qué se ha convertido en pieza indispensable para Lionel Scaloni.
Llueven los elogios
En redes sociales, los elogios se multiplicaron para el jugador del Atlético de Madrid, cuya influencia en el juego es cada vez más notoria. “Lo de Thiago Almada hoy es un escándalo. Pisa todas las zonas del tercio ofensivo y organiza con una claridad impresionante”, escribió el analista Mando Sanabria en ‘X’. Otros hinchas fueron más contundentes: “Thiago Almada es uno de los mejores mediocampistas del mundo”.
El contexto del adiós de Messi en Argentina también contribuye a que se hable de Almada como su sucesor natural. El propio estilo del exjugador de Vélez, con capacidad para moverse entre líneas y generar ventajas desde cualquier sector, recuerda al primer Messi creativo. No es casualidad que la afición lo mire con esperanza cuando se menciona el futuro de la albiceleste.
En el Atlético de Madrid, Diego Simeone también disfruta de este nivel de su nuevo mediocampista estrella. Almada llegó para aportar desequilibrio y verticalidad, y en apenas semanas ya es una referencia en el Metropolitano. Su evolución parece no tener techo, y ahora suma protagonismo internacional en un momento de cambio generacional para Argentina.