El yogur, ese delicioso y versátil lácteo, se ha convertido en una opción popular para el desayuno y otros momentos del día debido a sus innumerables beneficios para la salud. Pero no todas las opciones son nutritivas ni saludables, por lo que hay que saber escogerlo muy bien en el supermercado.
Los médicos y nutricionistas elogian el yogur por su contenido de probióticos, que ayuda a mantener una flora intestinal saludable y mejora la digestión. Además, este delicioso alimento está repleto de nutrientes esenciales. Como proteínas de alta calidad, calcio, vitamina B12, zinc y fósforo, todos los cuales son cruciales para mantener un cuerpo sano y fuerte.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. Y es que solo existen dos tipos de yogures que los médicos recomiendan para desayunar debido a su contenido nutricional y beneficios para la salud.
¿Cuáles son los dos yogures más saludables para el desayuno?
Dentro de la variedad de opciones de yogures disponibles en el mercado, los médicos destacan dos tipos como las opciones más saludables para incluir en nuestra dieta diaria. Los yogures griegos y los yogures naturales. Aunque ambos comparten similitudes en términos de contenido nutricional, tienen algunas diferencias clave que los hacen ideales para diferentes situaciones.
1. Yogur natural
El yogur natural, también conocido como yogur sin sabor, es una excelente opción para el desayuno debido a su bajo contenido de azúcar y su alta concentración de probióticos. A diferencia de los yogures de frutas que suelen contener azúcares añadidos, el yogur natural obtiene su ligero sabor dulce de la lactosa propia del producto lácteo.
Además, este tipo de yogur genera una mayor sensación de saciedad. Lo que puede ayudar a controlar el apetito durante más tiempo y reducir la necesidad de picar entre comidas.
2. Yogur griego
El yogur griego, por otro lado, también es una opción saludable, especialmente por su mayor contenido de proteínas y grasas saludables. Este tipo de yogur es más cremoso y apetecible debido al proceso de elaboración.
Durante este proceso, se retira parte del agua y agrega nata para obtener una textura más densa y suave. Si bien su contenido de grasa es más elevado que el yogur natural, los expertos sugieren que es una excelente opción para un consumo más puntual. Como antes de realizar ejercicio, debido a su mayor aporte calórico.
Cómo Hacer Yogurt Natural y Griego
¿Qué beneficios ofrecen ambos yogures para la salud?
El consumo regular de yogur, ya sea natural o griego, ha sido asociado con una serie de beneficios para la salud y el control del peso. La presencia de probióticos en ambos tipos de yogures contribuye al equilibrio de la microbiota intestinal, fortaleciendo el sistema inmunológico y mejorando la digestión. Además, se ha observado que el yogur puede reducir el riesgo de obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
Además de sus beneficios para la salud, el yogur, especialmente el griego y el natural, es una opción saciante y nutritiva para el desayuno. La combinación de proteínas y grasas saludables ayuda a mantenernos saciados durante más tiempo. Reduciendo así la necesidad de picar entre comidas y controlando la ingesta calórica.
Esto lo convierte en una elección inteligente para aquellos que buscan mantener o perder peso sin comprometer la nutrición y el sabor.
La importancia de revisar muy bien la lista de ingredientes
Pero no todo vale. Al elegir un buen yogur, es esencial revisar la lista de ingredientes. Optar por las opciones más sencillas y que contengan principalmente leche, fermentos lácticos y, opcionalmente, leche en polvo o nata, garantiza que estemos consumiendo un yogur de alta calidad y con menos aditivos innecesarios.
No hay duda, el yogur es una fuente inagotable de beneficios para la salud y una opción deliciosa para el desayuno. Pero los yogures griegos y naturales destacan como las únicas opciones recomendadas por los médicos debido a su contenido nutricional y sus propiedades probióticas.