El guardameta portugués André Moreira jugará la próxima temporada en Os Belenenses en calidad de cedido, según ha hecho oficial el club luso.
Arranca así una nueva etapa para el cancerbero, de 20 años, que empieza a ver la luz al final del túnel tras la grave lesión que sufrió el pasado mes de febrero, que le ha apartado de los terrenos de juego hasta día de hoy. Moreira, entonces rayando a gran nivel en el União de Madeira, se rompió el menisco de su rodilla, tuvo que pasar por quirófano y se perdió el tramo final de la campaña. Esto le dejó sin opciones de haber sido el tercer portero de la Portugal campeona de Europa y tampoco ha podido defender la meta de la selección olímpica.
«Solo quiero volver a jugar», admitía el cancerbero hace apenas una semana en ‘O JOGO’, que no ha pisado aún el Cerro del Espino y tenía la aprobación del club para elegir, junto con su representante Jorge Mendes, su destino. Tras ser el arquero titular de la selección Sub-19 (con la que fue subcampeón de Europa en 2014) y Sub-20, ahora quiere trabajar y hacer una buena campaña para estar en la Eurocopa Sub-21 que se celebra el próximo verano. No lo tendrá fácil. Os Belenenses cuenta en plantilla con otros tres guardametas, aunque a priori parte con ventaja de tener mejor nivel que sus rivales.
André Moreira fichó por el Atlético de Madrid en la campaña 2014/2015, temporada en la que fue cedido al Moreirense. Su buen papel le permitió ir al Mundial Sub-20 y ser uno de los jugadores más destacados de una Portugal que no estuvo a la altura de las expectativas. Su segunda experiencia fue en el União de Madeira. Su tercer envite también será en su país, en un club con historia, que el año pasado disputó competición europea y que este año deberá pelear por estar en los puestos de honor detrás de los tres titanes lusos.