De sobra queda demostrado que la directiva del Barça no es muy buena a la hora de vender. Suele traspasar grandes talentos a precios de risa y ahora queda retratado por esta situación. Y es que, por la mala gestión, han podido perder 68 millones de euros que buena falta les hace.
La venta de Marc Cucurella fue del todo extraña en el Camp Nou, un lateral izquierdo con mucho futuro fue traspasado a la primera de cambio. Sin apenas oportunidades, la mala economía provocó que se tomaran medidas urgentes.
Sin embargo, tras conocer las cifras que se han pagado por este jugador, queda en evidencia la nefasta gestión que se hace en el palco cuando tienen que vender. La falta de paciencia les ha condenado y Marc Cucurella es la gran prueba de ello.
Marc Cucurella no tuvo más remedio que irse
Marc Cucurella era una de las sensaciones del filial. Forjando su futuro como un gran lateral izquierdo, consiguió demostrar que su talento era digno de verse en las grandes ligas.
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Para la directiva de aquel entonces, no era oportuno dar una oportunidad al joven español en el Camp Nou, y el futbolista lo consideró como inmerecido. Por lo tanto, ambas partes llegaron a un acuerdo para el traspaso.
Se fue al Getafe y el club tan solo recibió 1,8 millones de euros por dejarlo salir, una cifra muy baja en comparación a su progresión. Y es que Marc Cucurella luego se fue al Brighton y de allí, lo fichó el Chelsea por 68 millones de euros.
Eso demuestra la poca paciencia que tiene el FC Barcelona con algunos jugadores. El lateral izquierdo pudo haber dejado una gran cantidad económica en las arcas del Camp Nou si se hubiera esperado el momento oportuno.
Eso, o quizás haberle dado una oportunidad de demostrar su talento y ahora podría ser importante a las órdenes de Xavi Hernández. En el lugar de Balde, sería Marc Cucurella el titular y reemplazo de Jordi Alba.
Paciencia, el factor que necesita el FC Barcelona
La poca paciencia que tiene y la mala gestión para saber vender ha hundido al club y es uno de los grandes motivos por los que la situación económica es nefasta. Otros jugadores como Luis Suárez, David Villa o Memphis Depay han salido regalados y le han costado ligas al FC Barcelona.
Ahora podrían estar tomando medidas precipitadas con otros cracks que han llegado a la Ciudad Condal por mucho dinero. Ya no hay tiempo de adaptación y la directiva quiere resultados urgentes.
Por lo tanto, jugadores que llevan poco tiempo en el club tienen el cartel de transferibles. Es el caso de Raphinha, Ferran Torres o Kessié, que podrían salir traspasados al igual que pasó con Marc Cucurella en el pasado.
Coutinho y Griezmann son casos aparte
Las incorporaciones del brasileño y del francés pueden confirmarse como las dos peores gestiones que ha llevado a cabo el FC Barcelona en los últimos años. Ambos llegaron por una gran cantidad de dinero y han salido por la puerta de atrás del Camp Nou.
Sus fichajes superaron los 200 millones entre los dos y su nivel mostrado no ha sido para tirar cohetes. Ni uno ni otro consiguieron demostrar su talento y acabaron abandonando el vestuario.
Lo peor de todo es que su precio de venta fue ridículo. Ambos se vendieron por 20 millones cada uno y han dejado un déficit económico muy negativo. Una vez más, se demuestra que el FC Barcelona no es el rey de las finanzas.