Miguel Angel Gil Marin

Aclarando el verdadero origen de la deuda del Atlético de Madrid

El Atleti es un infierno ahora mismo

La asociación Señales de Humo de aficionados del Atlético de Madrid desea informar en relación con la velada acusación vertida por Miguel Ángel Gil Marín vía diario Marca a esta asociación, a la que sin citarla achaca la responsabilidad del endeudamiento derivado de las operaciones urbanísticas impulsadas por él mismo.

Miguel Ángel Gil Marín omite, entendemos que para ocultar su calamitosa gestión del Club Atlético de Madrid, que la judicialización del ámbito Mahou-Calderón viene dada por la ilegal proyección urbanística del mismo, tal y como Señales de Humo denunció y así ha sido decretada por los jueces. Es uno de los fines estatutarios de esta organización impedir que se perpetren delitos o cualquier tipo de irregularidades en nombre de nuestro Club algo que viene tomando por costumbre el Consejero Delegado ilegítimo y su socio Cerezo.

Más allá de la deuda llamada histórica, resultado de la gestión desleal y negligente o incluso delictiva de los Gil y Cerezo desde el año 1992, desde la organización se quiere poner negro sobre blanco los conceptos que nutren buena parte de otra deuda. Esta sería la de Gil Marín y Cerezo con el Club.

Al hilo de lo que se comenta en el citado artículo del diario Marca se observa que para entender la difícil situación patrimonial del club rojiblanco el Sr. Gil Marín omite citar que:

Ha venido apropiándose de cantidades millonarias durante varios ejercicios, aduciendo contraprestación económica de su cargo de Consejero Delegado, cargo que no debía ocupar por haber sido condenado por estafar a la SAD y por ende estar vedado por los Estatutos de la SAD y la legislación mercantil y la propia Ley de Sociedades Anónimas Deportivas. Superan los 10 millones de euros.

Enrique Cerezo en una rueda de prensa
El Atlético de Madrid afronta algunos problemas | Europa Press

Ha retirado de las arcas de la SAD los 11.800.000 euros que obligara la Audiencia Nacional a depositar al no desembolsar el importe de las 236.000 acciones suscritas en fraude de ley en 1992. Debiendo adicionalmente los intereses desde entonces, es decir, casi 30 millones.

Ha retirado de la contabilidad de la SAD los 16.800.000 euros que obligara la Audiencia Nacional a anotar tras la estafa perpetrada con el Caso Negritos, al atribuir un valor contable a jugadores que no lo tenían en 1998. Debiendo adicionalmente los intereses desde entonces, es decir, casi otros 30 millones.

Siguen desaparecidos de la contabilidad de la SAD los 72 millones de euros que detectara la Audiencia Nacional, y que salieron a través de Van Doorn con destino desconocido antes de 1999. Con sus intereses desde entonces, se superarían otros 110 millones.

Es decir, sin entrar a valorar el efecto económico de su gestión deportiva que nos tuvo fuera de Europa 14 años, 2 años en Segunda y 4 disputando el Descenso, en las cuentas de la SAD se echan en falta 180 millones de euros.

Y a dicha cantidad hay que sumar los 73 millones de euros de pérdidas derivados de la operación Ciudad Deportiva de Alcorcón, más los 25,5 millones de pérdidas de la resolución negligente del contrato de ejecución de La Peineta a cambio de plusvalías urbanísticas del Calderón con FCC.

Primer plano de Enrique Cerezo en un photocall
Enrique Cerezo ha tenido grandes pérdidas | Europa Press

El suma y sigue asciende, pues, a un total de más de 275 millones de euros derivados de deuda de apropiadores indebidos y estafadores y de su propia gestión negligente y falaz.

Y todo ello sin contar además el coste de oportunidad que suponen que todos esos importes no hayan sido reinvertidos en el club para su crecimiento deportivo y social.

Para aquellos que aún piensen que Gil Marín y Cerezo aseguran su gestión con su dinero, informarles que era y es falso. Es la propia SAD la que abona anualmente el coste de cualesquiera avales que deban depositar. Nunca han puesto un duro por el Atleti que no hayan recuperado con creces.

Se descubre que el traslado del estadio, a todas luces innecesario e indeseado por la mayoría de la afición, se montó sobre una base mendaz e ilusoria, que ya no solo no servirá para fichar a grandes estrellas o acabar con la deuda como se nos argumentó falsamente. Una argucia que en su día sirvió para convencer a propios y extraños y que supondrá un endeudamiento grave que se pretende atribuir a Señales de Humo para encubrir la gestión fraudulenta e incompetente de Gil Marín y Cerezo.

Por nuestra parte, convocamos a los medios y a los gestores del Club para que aporten argumentos que contrarresten o desmientan lo aquí escrito, en el más profundo convencimiento de que nadie dirá absolutamente nada, haciendo bueno el refrán y, una vez más, podremos comprobar eso de que “el que calla otorga”.