Muchos de los mejores jugadores del mundo no se contentan solo con maravillarnos sobre el verde, sino que una vez retirados deciden hacerlo desde el banquillo. Guardiola, Zidane, Cruyff, Xavi o Pirlo son solo algunos de los futbolistas de talla mundial que han decidido llevar las riendas de un vestuario. Este es el caso de un exjugador del Real Madrid, que no disfrutó en el césped del Bernabéu.
Nuri Sahin conoce a la perfección lo que se siente, dentro del campo y desde el banquillo, ya que no todos tienen la misma calidad con la pizarra por la presión que reciben. El que es actual técnico del Antalyaspor turco y excentrocampista tocó el cielo en el Borussia Dortmund y bajó a los infiernos en el Real Madrid.
Nuri Sahin no era feliz
Nuri Sahin fichó con 22 años por el Real Madrid en el año 2011 como uno de los jóvenes con más futuro. La transacción se cerró por diez millones de euros y lo que pretendía ser la oportunidad perfecta del turco para consolidarse entre los mejores se convirtió en una pesadilla.
Su ascenso meteórico se frenó en seco al pisar Madrid. “Después de las lesiones no aguanté la presión y la tensión. ‘Estás en Madrid, debes estar feliz’. Pero eso no es suficiente”, esto respondía el centrocampista ya retirado en una entrevista reciente.
Nuri Sahin sufrió una lesión de rodilla y mucha presión
La primera temporada, Nuri Sahin se lesionó gravemente de la rodilla y pudo jugar apenas 10 partidos donde anotó un gol. La lesión, la mala actuación sobre el campo y el cambio de Dortmund a Madrid supuso una situación de crisis que no pudo manejar.
“Como jugador estaba seguro de que podía jugar en el Madrid, era un jugador top. Eso no es suficiente para allí. También tienes que ser mentalmente fuerte. El entrenamiento nunca se detiene, con las lesiones que tuve no estaba preparado”, añadía.
Poco antes de finalizar su etapa como jugador de fútbol, Nuri Sahin afirmó que no fue feliz en sus temporadas en el Real Madrid y en el Liverpool, “solamente puedo jugar al 100% cuando soy feliz”.
Nuri Sahin llegó gracias a Mourinho
Su llegada al Paseo de la Castellana estuvo impulsada por José Mourinho. El técnico luso quedó maravillado de su buena temporada en la Bundesliga y lo convenció para ponerse a sus órdenes. Tras una temporada más que discreta, Nuri Sahin abandonó la disciplina blanca, pero antes mantuvo una reunión con el que había orquestado su llegada.
“El día que me fui, hablamos y lo que me encanta de Mourinho es que es honesto. Directo. Te mira a los ojos y te cuenta todo. Si eres bueno, eres bueno, si no lo eres, no lo eres”, así resume la última conversación al abandonar el Real Madrid.
La vuelta a casa provocó la felicidad de Nuri Sahin
Tras su etapa defendiendo al Real Madrid, Nuri Sahin volvió durante seis temporadas al club de sus amores, el Borussia Dortmund. En el Signal Iduna Park fue muy querido por los aficionados y finiquitó su segunda etapa con 12 goles y 16 asistencias.
Pasó dos temporadas en el Werder Bremen realizando un papel discreto, aunque contó con más minutos, en especial en la segunda temporada. Después puso rumbo a Turquía para defender los colores del Antalyaspor, equipo que dirige en la actualidad.
Nuri Sahin, motivado desde el banquillo
Ahora las preocupaciones de Nuri Sahin son otras. Centrado en salvar a su equipo del descenso, la presión que recibe está muy alejada de la que recibía aquel joven de 22 años que dejó de sonreír en el terreno de juego.
Aquella etapa en Real Madrid y Liverpool la tiene muy presente todavía. A día de hoy, con 34 años, habría sabido cómo lidiar con una presión que le condicionaba dentro y fuera del campo. Pese a todo, volvió a casa y pudo volver a ser feliz con un balón en los pies y una pizarra en la mano.
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