Sergio Ramos vuelve a ser el centro de las miradas en un PSG que se cae a pedazos. Tras la casi segura marcha de Messi y Neymar, él parecía ser el siguiente, pero la directiva se lo ha replanteado mejor, poniéndole 2 condiciones si quiere seguir en Francia.
A sus 37 años, los mejores años de fútbol del de Camas han llegado a su fin. Sin embargo, quiere seguir jugando en Europa, al menos, una temporada más, y el cuadro parisino parece ser de los únicos que sigue apostando por él.
Eso sí, no a un bajo coste. Si Sergio Ramos quiere continuar ligado a la entidad, va a tener que hacer un gran esfuerzo y aceptar que ya no es el que era. Es más, va a ser menos que nunca.
Sergio Ramos consigue lo que quería, pero no le sale gratis
La directiva está harta de tirar el dinero y ha tomado la decisión de desprenderse de dos cargas económicas enormes, como son el sueldo de Messi y de Neymar. Argentino y brasileño saldrán de París tras ser prácticamente expulsados por su afición, y eso podría beneficiar indirectamente a Sergio Ramos.
El club tiene en mente un nuevo proyecto en el que el carismático líder será Mbappé, siempre y cuando se quede. Para rodear al francés pretenden crear una plantilla todavía más competitiva que esta temporada.
Sergio Ramos entraría dentro de la idea del presidente para volver a optar a ganar la Champions League. No obstante, sería asumiendo un rol totalmente diferente al que ha estado acostumbrado a lo largo de su carrera.
Sería aceptando que probablemente sea el recambio natural de los titulares, pero siendo condenado al banquillo en los partidos importantes. Para sustituirle el año que viene, Skriniar y Tomori serían los principales candidatos.
Pero no todo queda aquí. La segunda condición que deberá aceptar Sergio Ramos si quiere quedarse en el PSG es la de rebajarse sustancialmente el sueldo. Su papel de actor secundario no sería compatible a los 12 millones que cobra por temporada, y a ello se debe la oferta a la baja.
El andaluz tiene un dilema. Quiere jugar una temporada más en el viejo continente, pero la propuesta que le hacen en París no acaba de convencerle. Desgraciadamente, en Europa no hay un equipo interesado en él como para mantener su elevado sueldo.
A sus 37 años, Sergio Ramos debe aceptar la realidad. Aquel central que lideró al Real Madrid en sus mejores años no volverá nunca más.