Simeone se arrepiente de no haber convencido a uno de los mejores jugadores que ha entrenado para que continuase con él. El Atlético empezó muy mal la temporada, pero la ha acabado de una forma espectacular. Desde la marcha de su discípulo, el ‘Cholo’ no ha encontrado un sustituto de garantías y hoy en día tiene que disfrutar de él por la televisión.
Rodri Hernández se ha convertido en uno de los mejores pivotes del mundo desde que salió del Atlético de Madrid. Gran parte de la culpa de este logro es de Pep Guardiola, quien ha diseñado un estilo de juego que se adapta a la perfección a las condiciones del español en el Manchester City.
Rodri Hernández escuchó al 'Cholo', pero no le convenció
Rodri Hernández eliminó al Real Madrid de las Semifinales de la Champions haciendo una eliminatoria espectacular y dominando el timón de los 'skyblue'. El ‘5’ de Guardiola llegó al Manchester City después de que los ingleses pagaran su cláusula de 70 millones en 2019. Simeone intentó convencer al canterano rojiblanco, que había repescado del Villarreal un año antes por 25 millones para que continuara en el club, pero no pudo evitar que los cantos de sirena del City, Bayern o PSG provocaran que el pivote quisiese salir.
Simeone comenzó a darle minutos de forma progresiva en 2018, pero después de apenas cinco jornadas le entregó el timón del equipo. Rodri Hernández lo jugó absolutamente todo durante aquella temporada, acumulando un total de 3.675 minutos. Aunque los resultados no acompañaron y no pudo levantar ningún título, la afición del Metropolitano lo consideraba parte de su futuro inmediato, pero el sueño se acabó muy pronto.
Rodri dejó el Atético tras pasar por su cantera y crecer en el Villarreal
Después de cuatro temporadas en Manchester ha llegado al nivel que se imaginaba. Rodri Hernández mantuvo varias conversaciones con Simeone acerca de su continuidad en la capital de España, pero tras toda una vida en el Atlético y un breve paso en Villarreal, buscaba nuevas experiencias.
Pep Guardiola repitió con él el trabajo que había hecho con un joven Busquets cuando se sentó en el Banquillo del Camp Nou. Aunque los dos son perfiles diferentes, Rodri Hernández es el sustituto natural del de Badía en la Selección y ahora le ha robado la posición que tantos años ha monopolizado el ‘5’ del Barça, convirtiéndose en el mejor pivote del mundo.