Atlético de Madrid y Barça llevan una década protagonizando varios movimientos en verano que han llevado a muchos jugadores a intercambiar ambas camisetas. Habitualmente, los rojiblancos han sido los grandes beneficiados en dichos movimientos, incorporando a estrellas como David Villa o Luis Suárez. Sin embargo, los azulgranas no han quedado igual de contentos, llevándose a futbolistas cuyo nivel bajó considerablemente tras aterrizar en Barcelona.
Uno de los acuerdos más polémicos a los que llegaron fue la cesión de Joao Félix en el mes de agosto del año 2023, un movimiento muy forzado. El portugués no quería seguir bajo las órdenes de Simeone y dejó muy claro que únicamente saldría del Metropolitano para marcharse con Xavi Hernández. El club catalán aprovechó la voluntad del delantero para presionar e intentar llevárselo a coste cero de manera permanente, algo que no ocurrió.
La jugada maestra de Joan Laporta
En aquel momento, el Atlético de Madrid no tenía ninguna posibilidad de salir ganando, pues Joao Félix declaró públicamente que su firme deseo era fichar por el Barça. Sin embargo, Gil Marín no tenía ninguna intención de perder más dinero tras pagar al Benfica más de 120 millones de euros por su traspaso en el 2019. El portugués ya había fracasado en su corta aventura en el Chelsea, lo que provocó que no contase con ofertas satisfactorias sobre la mesa.

Presionó hasta los últimos días del mercado y terminaría logrando su objetivo, aunque su aventura en el FC Barcelona tampoco fue lo que esperaba. El objetivo de Laporta era intentar cerrar el fichaje lo más barato posible, y el Atlético de Madrid impidió cualquier opción de que aquello ocurriese. Ahora, los rojiblancos tienen la posibilidad de devolverle aquella jugada gracias a un Clement Lenglet que está asfixiando económicamente al club.
Simeone quiere mantener al central otro año
El francés llegó al Atlético de Madrid a finales del mes de agosto tras caerse el fichaje de un David Hancko que tuvo que continuar en el Feyenoord. El Barça estaba encantado con la operación, pues se ahorraba parte de la ficha de Clement Lenglet, ganando tiempo para buscarle otro destino. Ha sido capaz de demostrar su mejor versión desde que salió del Sevilla, volviendo a ser convocado por la selección de Francia para poder disputar la Nations League.
El problema llega de cara a la próxima campaña, pues los colchoneros no tienen intención de pagar un traspaso para hacerse con sus servicios. El Barça estaría situando su precio de salida en unos 10 millones, cantidad demasiado elevada para un defensor que hacía varios años que no destacaba. Según informó el periodista Rubén Uría, en el Metropolitano esperan lograr otra cesión o incorporarle como agente libre después de que rescinda su contrato.