A falta de pocos meses de que se abra el mercado veraniego, el culebrón de Joao Félix vuelve a estar en la boca de todos. Su buen rendimiento en el Barcelona ha hecho que el club blaugrana se plantee contar con él para la próxima temporada. No obstante, hay un duro inconveniente, llegar a un acuerdo que satisfazca los intereses del Atlético de Madrid.
Y es que Miguel Ángel Gil Marín tiene claro que no quiere repetir la fórmula que le ha llevado al Barça esta campaña. Quiere a Joao Félix lejos del Metropolitano y, si es a cambio de un ingreso directo, mucho mejor. Es por ello que, como ya comentamos en ESTO ES ATLETI, tras hacernos eco de MUNDO DEPORTIVO, el Atleti ya habría tasado al portugués.
No obstante, si el Barcelona no consigue llegar a dicha cifra, el Atleti estaría abierto a otra propuesta. Eso sí, no quiere repetir la fórmula de "cesión simple", según Matteo Moretto. Esto conlleva que el Barça, si quiere contar con Joao una temporada más, deberá poner sobre la mesa otro tipo de oferta.
Esto deja claro una cosa, que el FC Barcelona y el Atlético de Madrid tendrán que sentarse a negociar una vez más. Será en los despachos donde se decidirá cuál será el futuro del jugador, quien tiene claro que su deseo es quedarse en el club blaugrana. De esa manera, Laporta y Deco se deberán ver las caras con Cerezo y Gil Marín para poner fin al culebrón.
Relación rota con el Metropoltiano
Si hay otra cosa que está clara es que en el Metropolitano no quieren a Joao. Su primera visita como rival a su ex estadio no fue nada cómoda para el jugador a pesar de abrir el marcador. En cada balón que tocaba el portugués, recibía una sonora pitada de todo el estadio, que no olvida las formas en las que se marchó.
Y es algo esperable, pues todo el mundo recuerda el revuelo que hubo en su última temporada. Bajo rendimiento, faltas de respeto, de compromiso e incorencias con el entrenador llevó a que el Metropolitano se dividiera en dos bandos. Esto creó una situación totalmente insostenible en el club, que terminó solucionado a corto plazo cediéndolo al Chelsea de Londres.
Algo que solucionó muy pocas cosas, pues el club inglés no ejerció la opción de compra y Joao regresó a Madrid. Tras un verano incómodo, el Barcelona apareció en escena y se hizo con los servicios del jugador. Este verano habrá un nuevo capítulo que, si no pasa nada extraño, se espera que sea el último.