El Atlético de Madrid podría tener ante sí una de esas oportunidades de mercado que no se presentan todos los días. Thomas Partey, exjugador colchonero y uno de los mediocentros más sólidos de su etapa con el club, queda libre tras finalizar contrato con el Arsenal. Un escenario que no pasa desapercibido en el Metropolitano.
No seguirá en Londres
El mediocentro ghanés no renovará con el conjunto londinense, según confirmó el periodista Fabrizio Romano. Su etapa en la Premier League ha tenido momentos brillantes, aunque marcada por algunas lesiones que lastraron su regularidad. Aun así, su rendimiento, especialmente en la temporada 2022/23, fue clave para los planes de Mikel Arteta.
Thomas jugó 167 partidos con el Arsenal y su influencia en el juego fue notable. Su capacidad de recuperar balones, ganar duelos y ofrecer equilibrio en el centro del campo es exactamente el perfil que Simeone valora. No en vano, fue uno de los jugadores más utilizados por el técnico argentino en su anterior etapa en el Atleti.
Un fichaje que no es imposible
Pese a que el Atlético de Madrid ya ha cerrado el fichaje de Johnny Cardoso, un centrocampista más joven y con proyección, podría no cerrar la puerta a Thomas. Su llegada a coste cero representa una tentación para el club, que atraviesa un verano condicionado por los límites salariales y la necesidad de ajustar bien las cuentas.
Según fuentes cercanas al club, Simeone sigue guardando un enorme respeto profesional por Thomas. Lo considera un jugador que entiende su sistema, que tiene personalidad en los partidos grandes y que además puede ser un mentor ideal para los jóvenes fichajes como Cardoso. Su perfil encaja en esa idea de centrocampista con carácter, recorrido y orden táctico.
Eso sí, no será una operación sencilla. Thomas tiene mercado en Arabia Saudí y también ha despertado el interés de clubes de la Serie A. Pero el hecho de que guarde buenos recuerdos del Atlético de Madrid y mantenga una buena relación con Simeone podría inclinar la balanza. La pelota está ahora en el tejado del club y del propio jugador, pero el regreso del ghanés no es una locura.