El futuro de Thomas Lemar en el Atlético de Madrid parece decidido. El jugador francés, aquejado por lesiones y sin minutos relevantes en la presente temporada, no entra en los planes de Diego Simeone para lo que resta de campaña. Tanto el técnico argentino como el CEO rojiblanco, Miguel Ángel Gil Marín, tienen claro que es el momento de buscar una salida para el centrocampista en este mercado de invierno.
Un fichaje que no cumplió las expectativas
Desde su llegada en 2018 procedente del Mónaco por una cifra de 72 millones de euros, Lemar no ha logrado asentarse como un jugador determinante en el Atlético. Su desempeño ha estado marcado por la irregularidad y, más recientemente, por una serie de lesiones que han limitado al extremo a apenas unos minutos en la temporada.
Su último encuentro oficial con los colchoneros fue el pasado 31 de octubre, en el partido de Copa del Rey ante el Vic, del que salió lesionado. Desde entonces, no ha vuelto a vestir la camiseta rojiblanca, y su valor de mercado se ha desplomado hasta los 5 millones de euros.
El Atlético busca alternativas
La salida de Lemar no solo liberaría una ficha, sino también una de las masas salariales más altas de la plantilla, lo que abriría la puerta a posibles incorporaciones. Sin embargo, su estado físico y falta de continuidad complican una venta, y hasta ahora, el club no ha recibido ofertas concretas por el jugador.
El futbolista también está interesado en encontrar un nuevo destino, donde pueda recuperar sensaciones y disfrutar nuevamente del fútbol. Mientras tanto, Lemar sigue trabajando en el gimnasio para poner fin a su racha de lesiones, un aspecto que ha condicionado su paso por el Atlético de Madrid
Un desenlace inevitable
Desde el Atlético, tanto el club como el cuerpo técnico parecen haber asumido que el fichaje de Lemar no cumplió las expectativas. Su participación, prácticamente nula en la presente temporada, y la falta de impacto en los últimos años han llevado a una situación insostenible.
Además, el propio jugador ha solicitado no hacer públicos los partes médicos tras sus últimas lesiones. Esto apunta a un contexto delicado de salud mental, dado el desgaste que ha supuesto para él este periodo lleno de contratiempos físicos.