La tarde en Son Moix dejó más dudas que certezas para Rodrigo Riquelme y el Atlético de Madrid. En un partido en el que los rojiblancos ganaron por la mínima 0-1 frente al RCD Mallorca, la actuación de Riquelme fue uno de los aspectos más señalados. El joven jugador, que tuvo varias oportunidades para demostrar su valía, sin embargo no aprovechó la oportunidad que le dio su entrenador.
El error que incendió a Simeone
Con 0-1 en el marcador y la posibilidad de cerrar el partido, Riquelme se encontró con un mano a mano clarísimo frente a Dominik Greif. Ángel Correa estaba en una posición perfecta para recibir un pase y rematar sin oposición; sin embargo, el canterano optó por un tiro directo. La frustración de Correa y del cuerpo técnico fue palpable, y este error incendió al propio Diego Pablo Simeone que insistió en que hay que ser más generosos.
El Atlético, que sigue en su lucha por alcanzar los primeros puestos de LALIGA, no puede permitirse errores que podrían costar puntos vitales, y menos cuando surgen de decisiones individuales. Simeone confió en Riquelme para sumar dinamismo y habilidad en ataque, pero el rendimiento del jugador ha sido irregular e inconsistente.
Rendimiento pobre este año
A lo largo de la temporada, Riquelme ha mostrado destellos de calidad, aunque también errores que afectan al equipo. Los rumores en el club indican que el Atlético estaría considerando seriamente la posibilidad de desprenderse de él en el próximo mercado de enero. La decisión de Simeone y la directiva estaría motivada por la percepción de que el jugador no ha alcanzado el nivel esperado para el equipo.
El Atlético podría buscar una salida en forma de cesión o incluso una venta definitiva, sobre todo si el rendimiento de Riquelme no mejora en los próximos partidos. Esta posibilidad permitiría al equipo buscar refuerzos que ofrezcan una mejor garantía de rendimiento. El talento del jugador no está en duda, pero su falta de madurez en situaciones decisivas parece estar pesando en la evaluación del club.
El mercado invernal podría ser el escenario de un cambio de aires para Riquelme, cuyo desarrollo ha sido seguido con atención por otros equipos. Con las recientes actuaciones, sin embargo, el futuro del joven en el Atlético parece estar en la cuerda floja. Los próximos partidos serán decisivos para definir si su futuro sigue siendo rojiblanco o si tendrá que buscar nuevas oportunidades lejos del Metropolitano.