No hay ninguna duda de que Julián Alvarez se puede considerar como uno de los mejores fichajes del Atlético de Madrid en las últimas décadas. El delantero argentino ha caído de pie en el Metropolitano y se mantiene como el máximo goleador del equipo tras alcanzar los 20 tantos ante el FC Barcelona. Ya en verano su llegada se consideraba como un golpe sobre la mesa para el conjunto colchonero, incorporando a uno de los mejores del mundo.
Ahora, ha querido repasar en Infobae todo lo sucedido en el último año hasta haberse convertido en un titular indiscutible para Simeone en la delantera. A muchos les sorprendió su decisión de abandonar el Manchester City, pues era uno de los clubes más importantes de Europa que aspiraba siempre a todos los títulos. Sin embargo, el campeón del mundo ha querido explicarse y ofrecer las razones que le llevaron a llegar al fútbol español.
Julián Alvarez explica su decisión
A principios del pasado verano, un fichaje como el del argentino era casi un milagro para el Atlético de Madrid, pues iba a requerir de un gran desembolso. Sin embargo, la voluntad del propio futbolista fue clave, pues pensaba que era el momento para dar un giro a su carrera y apostar por un nuevo destino. Así lo ha explicado el propio Julián Alvarez, dejando muy clara la razón que le llevaría a marcharse de Inglaterra para vestir como rojiblanco.
“Algo dentro mío me decía que necesitaba un desafío diferente y buscar algo nuevo, no motivación, pero un reto diferente para mi carrera”, empezó explicando el delantero argentino. “Sentí que el Atlético de Madrid podía ser mi lugar para desarrollarme mejor y poder encontrar mi mejor versión”, dijo sobre su llegada al Metropolitano.
Un club que le acogió desde el primer día
Antes de su presentación oficial, Julián Alvarez comprobó en primera persona el cariño y la expectación que había generado tras anunciarse su fichaje. “Desde el primer día sentí el cariño de la gente, eso me hace sentir importante, después trato de mostrarlo en la cancha, el Cholo me convenció”, afirmó sobre los aficionados. Además, habló sobre el punto de inflexión que le llevaría a reunirse con Pep Guardiola para anunciarle que se marchaba del Manchester City ese verano.
“El City confío en mí, me trajo de River a Europa, jugué un montón de partidos, hice goles y ganamos títulos, eso fue perfecto y si hubiese seguido estaría cómodo”, explicó. “No la pasé mal, pero sí que uno quiere jugar los partidos importantes, en la final de Champions no entré y en la semifinal jugué pocos minutos”, manifestó. Ahora, ya es un ídolo en el equipo rojiblanco y todo apunta que se convertirá en el jugador franquicia una vez se marche Antoine Griezmann a la MLS.