Imagen de Saúl Ñiguez en el banquillo

La emotiva despedida de Saúl al Atlético de Madrid: 'Siempre intenté…'

El canterano rojiblanco se despide del club tras 17 años

El Atlético de Madrid ha dicho adiós a una de sus figuras más representativas de los últimos años. Saúl Ñíguez deja el club tras 17 años de vínculo, once de ellos en el primer equipo. Su marcha al Flamengo, tras rescindir su contrato, ha estado acompañada de una emotiva carta de despedida que ha tocado el corazón de la afición colchonera.

El canterano que se hizo leyenda

Saúl se despide del Atlético de Madrid como un canterano que lo dio todo por el escudo. Desde que llegó siendo un niño hasta convertirse en un referente en el vestuario, ha vivido cada etapa del club. En su mensaje, recordó cómo soñó con jugar en el primer equipo y terminó disputando 427 partidos oficiales.

Jugador de fútbol celebrando un gol con la camiseta del Atlético de Madrid.
Saúl celebrando un gol | Europapress

En su carta, Saúl se dirigió a la afición con palabras sinceras y agradecidas. "No me puedo despedir de mi vida", escribió, haciendo referencia a que el Atleti fue todo para él. También agradeció a Diego Simeone, quien apostó por él desde el primer momento y lo ayudó a madurar como futbolista.

Una vida de rojiblanco

El centrocampista alicantino también quiso rendir homenaje a sus padres, a sus hermanos y a su familia. Contó cómo de niño sufrió por estar lejos de casa, pero encontró en el Atlético de Madrid una segunda familia. Su mujer Yaiza y sus hijos crecieron a su lado durante su trayectoria rojiblanca.

Recordó con especial cariño el Vicente Calderón y expresó su pasión por el Metropolitano. Habló de su hija cantando el himno del Atleti y de amigos que se hicieron colchoneros por vivir su historia. Todo ello evidencia el vínculo profundo que siempre tuvo con el club de su vida.

Quiso parecerse a sus ídolos

“Siempre intenté aprender de los mejores”, escribió, mencionando a ídolos como Fernando Torres o Godín. También dejó claro que nunca se guardó nada: “Me dejaba la salud si hacía falta por ayudar al equipo”. Para los aficionados, fue mucho más que un jugador: fue uno de los suyos.

Jugador de fútbol del Atlético de Madrid corriendo en el campo durante un partido
Saúl durante un partido | Europa Press

Tras poner fin a su etapa en el club, Saúl Ñíguez inicia una nueva aventura en Brasil. Se marcha con la cabeza alta y el escudo tatuado en el alma. “Ahora soy como vosotros”, dijo en su despedida, dejando claro que será colchonero para siempre.