La MLS es una liga en pleno auge desde hace unos cuantos años con la llegada de grandes figuras del panorama futbolístico a Estados Unidos. La nación norteamericana quiere que su liga de fútbol profesional adquiera un nivel superior, por lo que sus clubes no escatiman en efectuar fichajes. Centrándose principalmente en el mercado europeo, muchos han sido los jugadores tentados por ofertas desde Estados Unidos para firmar por algún club de la MLS.
Tras la irrupción de Leo Messi y compañía en el equipo local de Florida, el Inter Miami, la MLS subió un escalafón en lo que a calidad respecta. Comprometidos a fichar dado el altísimo nivel de uno de sus rivales directos, el resto de equipos se han visto obligados a reforzarse y a seguir haciendo para poder competir adecuadamente. De entre los refuerzos que buscan los equipos de la liga americana, uno de los históricos de la competición le ha echado el ojo a una estrella del Atlético de Madrid.
La ofensiva estadounidense por Antoine Griezmann
Alentados por el deseo de Antoine Griezmann de jugar algún día en la liga norteamericana, Los Ángeles Galaxy preparan una ofensiva por el francés el año que viene. Los californianos quieren a Griezmann y estarían dispuestos a ofrecerle un contrato que esté a la altura de su leyenda, además de negociar una buena cantidad con el Atlético de Madrid. Centrados en ese proyecto futuro con Griezmann a los mandos, los Galaxy meditan ya cuál será su oferta para que el francés sea nuevo jugador de la MLS.
Reiterando en una infinidad de ocasiones su amor por la cultura estadounidense y su deseo de jugar allí algún día, Griezmann afirmó que el Atlético sería su último club europeo. A pocos días de debutar en LaLiga, el galo no se mueve del Atlético, al menos esta temporada, y solo piensa en dar lo mejor de sí para ayudar al equipo. Centrado, como he dicho, en el arranque liguero frente al Villarreal en el estadio groguet, la trama estadounidense queda relegada a un segundo plano para el entorno del delantero colchonero.
¿Fin de ciclo?
Desde luego, es muy apresurado vaticinar el futuro en pleno agosto del 2024 cuando la operación tendría lugar alrededor de un año después, pero también se ha de tener en mente. Griezmann, al igual que cualquier gran jugador, no es eterno, por desgracia, y los colchoneros saben que algún día será el momento de decir adiós de forma definitiva al astro francés. Haciendo caso omiso a lo que pueda pasar en el futuro, el francés está con las pilas cargadas para darlo todo esta ilusionante temporada que está por arrancar.
Primero este año y luego ya veremos
Y es que aunque la edad no perdone, Griezmann sigue teniendo cuerda para rato y para seguir deslumbrando al fútbol europeo con su enorme calidad. El francés encara esta campaña con ilusióny ganas por demostrarle a todos que aún le queda mucho fútbol en sus botas. Ajeno a cualquier tentativa de clubes que no sean el Atlético, Griezmann solo piensa en trabajar duro a las órdenes de Simeone para volver a comandar al Atlético en la 24/25.