Uno de los jugadores que más opiniones diferentes ha ido generando en los últimos años en el Atlético de Madrid es Rodrigo de Paul. El centrocampista Argentino ha mostrado siempre un nivel muy irregular sobre el terreno de juego, siendo mucho mejor con su selección. Ahora, afrontando su cuarta temporada en el equipo rojiblanco, todos esperan que sea el curso donde pueda dar un paso adelante.
Por calidad, el ex de Udinese puede ser uno de los mejores futbolistas en su posición, aunque le falta tener más continuidad. Seguramente, la campaña pasada fue en la que se le pudo ver un mejor nivel con la camiseta rojiblanca, pero fue insuficiente. Ahora, en un año donde Simeone contará con numerosas piezas en la sala de máquinas, tendrá que mostrar su mejor versión sobre el césped.
El momento de Rodrigo de Paul
Prácticamente nadie puede negar que el campeón del mundo tiene numerosas facultades muy útiles para el Atlético de Madrid. Tanto en Udinese como en la selección de Argentina, se ha podido ver a un Rodrigo de Paul mucho más protagonista. Precisamente, lo que se le pide en el equipo rojiblanco desde hace tiempo es que pueda ser un líder para el resto del vestuario.
Por su calidad y trabajo, tiene absolutamente todo a su favor para ser uno de los mejores jugadores que pueda haber en el mundo para la zona medular. Esta temporada debería ser la definitiva para un Rodrigo de Paul que aterrizó en la capital de España en el año 2021. Simeone va a contar con numerosas piezas para la sala de máquinas, sumándose el más que posible fichaje de Conor Gallagher.
El internacional inglés sería perfecto para obligar al argentino a tener que mostrar un mejor nivel de una manera más regular. En algunos partidos concretos, se ha podido ver a ese Rodrigo de Paul qué tantas veces ha maravillado con la camiseta Albiceleste. Si quiere seguir siendo igual de importante para Simeone, únicamente le queda la opción de trabajar duro y convertirse en ese referente que tanto tiempo se lleva esperando.
El Atlético de Madrid, igual que en su casa
En muchas ocasiones, se ha acusado a Rodrigo de Paul de mostrar más compromiso cuando le ha tocado competir con la camiseta de su país. Ahora, con la llegada de Julián Álvarez al Metropolitano, el argentino tendrá en el vestuario a una gran cantidad de compatriotas. Prácticamente se podría decir que Rodrigo de Paul se sentirá como si estuviese en una concentración habitual de la selección argentina.
Lo único que le queda es trasladar ese trabajo y sacrificio que muestra con la Albiceleste a sus partidos con el Atlético de Madrid. Ahora mismo, otras piezas como Pablo Barrios o Arthur Vermeeren están esperando su oportunidad para ser más protagonistas y ocupar su sitio. A Rodrigo de Paul solamente le vale dar un paso adelante si no quiere tener que empezar desde cero una vez más.