Rodrigo de Paul se ha convertido en uno de los nombres más discutidos dentro del Atlético de Madrid. Su rendimiento ha sido objeto de críticas en las últimas semanas, a pesar de ser uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla. Su salario anual alcanza los 6,67 millones de euros, lo que lo sitúa entre los futbolistas más destacados del club colchonero. Sin embargo, a medida que avanza la temporada, muchos se preguntan si su rendimiento está a la altura de lo que su sueldo sugiere.
Un salario elevado y un rendimiento cuestionado
El alto salario de Rodrigo de Paul refleja la confianza que el club y el entrenador, Diego Pablo Simeone, depositan en él. Desde su llegada al Atlético, se esperaba que el argentino se convirtiera en una pieza fundamental del equipo. Su experiencia en el centro del campo, así como su capacidad para influir en el juego, eran vistas como razones suficientes para justificar su contrato millonario.
No obstante, su rendimiento en el campo ha dejado mucho que desear. Aunque ha tenido momentos de brillantez, la consistencia ha sido un problema. Durante los partidos recientes, De Paul ha cometido errores que han costado puntos al equipo, y su actuación en el empate contra la Real Sociedad fue un claro ejemplo de ello. La afición ha comenzado a cuestionar si un jugador con un salario tan alto está contribuyendo lo suficiente al equipo.
La inmediatez de Conor Gallagher
Conor Gallagher llegó este verano al Atlético de Madrid procedente del Chelsea, donde fue capitán la temporada pasada. El futbolista inglés de 24 años recaló en las filas rojiblancas para reforzar el centro del campo y está mostrando una adaptación muy veloz. Se conoce desde años que a los nuevos jugadores les cuesta mucho entrar en los esquemas de Simeone, pero Conor ha caído de pie.
Suma ya dos goles esta temporada y Simeone ha demostrado confiar en él. Además, la afición colchonera está encantada con su nuevo jugador, a diferencia que con Rodrigo De Paul. El futbolista nuevo le está comiendo la tostada a un jugador que llegaba para ser fundamental, pero que no encuentra regularidad.