En los últimos días, Juanma Castaño abrió debate en COPE cargando contra el Atlético de Madrid por su gasto en fichajes. El periodista cuestionó que, pese a invertir fuerte en el mercado, el club rojiblanco no logre después títulos que justifiquen esa inversión. Sus palabras han generado ruido, pero también reacciones que apuntan a un relato incompleto.
La realidad escondida en el balance
Lo cierto es que, si se miran los números fríamente, el argumento de Juanma Castaño no se sostiene. Este verano, el Atlético de Madrid gastó prácticamente lo mismo que el Real Madrid en refuerzos. Sin embargo, la diferencia aparece en el balance neto, pues el club blanco cerró el mercado con -165 millones, mientras que el rojiblanco lo hizo con -108. Una brecha considerable que desmonta la teoría de despilfarro atribuida al Atleti.

Además, para entender el contexto hay que ampliar el foco más allá de una ventana de fichajes. Desde la llegada de Simeone en la temporada 2012-13, las cuentas comparativas son contundentes. El Barcelona presenta un saldo de -543 millones, el Real Madrid de -485 y el Atlético de Madrid de -249. Es decir, el club colchonero ha invertido menos de la mitad que sus grandes competidores directos.
Dato mata relato
Este dato resulta clave, porque refleja la sostenibilidad de un modelo que ha sido capaz de mantenerse en la élite. Con un gasto bastante más contenido, el Atlético de Madrid ha disputado dos finales de Champions, ha ganado dos Ligas y se ha asentado como tercer poder de España. Un balance que deja en evidencia la simplificación de Juanma Castaño.
Lo que a menudo se olvida en estos debates es el retorno deportivo y económico del proyecto de Simeone. Real Madrid y Barcelona han estado años fichando sin mirar el precio de los futbolistas. Sin embargo, el Atlético de Madrid ha sido un club que esperaba a dar salidas para poder traer nuevos jugadores.
El relato de que el Atlético de Madrid gasta igual que los gigantes es engañoso. Los datos muestran otra realidad: el club rojiblanco, quitando este año, ha invertido muy poco en fichajes. Simeone ha sabido exprimir los recursos y sostener al equipo en la élite sin los excesos habituales en Barcelona y Real Madrid.