Javi Galán llegó al Atlético de Madrid con grandes expectativas, pero su situación en el equipo ha dado un giro inesperado. El lateral izquierdo, que destacó en el Celta de Vigo por su rendimiento tanto defensivo como ofensivo, se ha encontrado relegado en el Atlético. Ahora, Gil Marín parece estar buscando activamente una salida para el jugador, en un intento por recuperar parte de la inversión hecha en su fichaje.
Desde su llegada, Galán ha quedado muy por detrás en la rotación del carril izquierdo, una posición dominada por Lino, Rodrigo Riquelme y Reinildo Mandava. Simeone ha preferido a estos tres jugadores en función de las exigencias tácticas de cada partido. Lino y Riquelme han aportado más en el aspecto ofensivo, mientras que Reinildo ha sido la elección defensiva del Cholo para fortalecer la zaga.
Nula adaptación
El esquema de Simeone no ha favorecido a Galán, quien estaba acostumbrado a jugar en una línea de cuatro defensas. Esta falta de adaptación ha resultado en una notable reducción de minutos para Galán, dejándolo prácticamente sin protagonismo en el equipo. Desde su llegada al Atlético, su participación ha sido mínima, lo que ha llevado a la directiva a replantearse su futuro en el club.
Javi Galán tuvo un breve paso por la Real Sociedad, donde disfrutó de más minutos en el campo. Sin embargo, su regreso al Atlético solo lo llevó de vuelta a una situación complicada. La falta de continuidad y confianza por parte de Simeone han afectado su rendimiento y han limitado sus oportunidades. Con la ventana de transferencias de invierno a la vista, Gil Marín y la directiva del Atlético están considerando seriamente la posibilidad de vender al jugador.
Se busca salida
El Atlético de Madrid, que tiene poca paciencia con los jugadores que no se adaptan rápidamente al esquema, busca una salida adecuada para Galán. La idea es encontrar un club que esté dispuesto a asumir su ficha y pagar una cantidad que permita al Atlético recuperar parte de la inversión. Para Javi Galán, el próximo mercado será decisivo, ya que necesita un equipo donde pueda recuperar la confianza y el ritmo de juego.
A sus 28 años, Galán aún tiene mucho que ofrecer, pero su tiempo en el Atlético parece llegar a su fin. Mientras tanto, Simeone seguirá confiando en sus otras opciones para el carril izquierdo, dejando a Galán en una situación incierta. Esta experiencia subraya lo complicado que puede ser encajar en un equipo con una estructura táctica tan definida como la del Cholo Simeone. Con su futuro en el aire, Galán y el Atlético esperan que el próximo paso sea el adecuado para ambas partes.