Joven sonriente con camiseta de rayas rojas y blancas frente a un fondo rojo con detalles geométricos azules y blancos

Giuliano Simeone asume el reto más ambicioso de su carrera en el Atlético de Madrid

El hijo del Cholo ha pasado de la duda inicial a ser clave en la banda derecha del Atlético y en los planes de Scaloni

Giuliano Simeone vive un momento clave en su trayectoria profesional. El joven delantero argentino ha dado un paso definitivo dentro del Atlético de Madrid tras un inicio que parecía destinado a ser secundario. Lo que comenzó como una oportunidad discreta se ha transformado en un desafío de primer nivel que marcará su futuro inmediato.

El club rojiblanco sorprendió al incluirlo de manera fija en el primer equipo tras sus grandes actuaciones en los Juegos Olímpicos de París. Desde entonces, el jugador ha encontrado su espacio y ha logrado convencer tanto al cuerpo técnico como a la afición. Su crecimiento ha sido constante, hasta convertirse en una de las piezas más destacadas del esquema colchonero.

Joven sentado en una banca roja con el logo de Puma al fondo mirando hacia un lado y tocándose la cara
Giuliano Simeone en el banquillo | Europa Press

Un papel cada vez más decisivo

Su debut como titular en Vigo, en una posición poco habitual como carrilero izquierdo, generó dudas sobre su encaje. Sin embargo, fue en el partido ante el Leganés  donde mostró su capacidad para cambiar el rumbo del equipo. Aquel choque, que comenzó con el Atlético  por detrás, lo convirtió en protagonista al revolucionar el ataque rojiblanco.

Hoy su rol ya no admite discusión. Simeone  se ha asentado en la banda derecha, formando una sociedad efectiva con Marcos Llorente. Además, celebró su primer gol de la temporada contra el Deportivo Alavés, sumando un aporte ofensivo que alcanzó 14 intervenciones directas en jugadas de gol.

Un jugador de fútbol con uniforme rojo y azul está en el campo durante un partido.
El Atlético confía en Giuliano | Europa Press

El salto de calidad ha llegado en un momento determinante  para su carrera. Con apenas unos meses de experiencia en la élite, afronta una campaña mucho más exigente. Su ambición lo impulsa a consolidarse no solo en el club madrileño, sino también en el ámbito internacional.

Entre el legado familiar y la Selección Argentina

En una entrevista con Clarín, Giuliano  explicó cómo la figura de su padre ha marcado su mentalidad. Comentó que heredó del Cholo  la pasión, el esfuerzo y la disciplina, virtudes que ahora intenta aplicar en cada entrenamiento. También destacó el ambiente positivo que encuentra en un vestuario con varios compatriotas, lo que hace más sencillo el día a día.

El delantero no oculta que la Selección Argentina es otra de sus grandes motivaciones. Reconoció que todo ha sucedido muy rápido, desde consolidarse en LaLiga  hasta debutar con el combinado nacional. Según sus propias palabras, detenerse a disfrutar demasiado puede ser un error, porque siempre hay rivales  esperando su oportunidad.

Logotipo del Mundial de Fútbol 2026 con el trofeo en el centro y colores llamativos de fondo.
El Mundial de 2026 se disputará en tres países | FIFA

Su gran sueño está claro: estar en la lista final para el Mundial de 2026. Acepta la competencia feroz que existe en la Albiceleste, pero asegura que su única meta es trabajar cada día para mejorar y ganarse un lugar. La exigencia de Argentina  no permite relajaciones, y él lo sabe perfectamente.

Palabra de Scaloni

El seleccionador Lionel Scaloni también ha valorado la progresión del delantero. En declaraciones a Flashscore destacó que Giuliano tiene el "ADN Simeone", un carácter competitivo que recuerda al de su padre. Lo que más resalta es su disposición constante a aprender  y analizar cada detalle junto al cuerpo técnico.

Scaloni  considera que aún es un futbolista joven con un amplio margen de mejora. Por eso ya forma parte habitual de la lista de convocados de la Selección. Su rol en el equipo dependerá de las necesidades de cada partido, pero se ha ganado un espacio en la consideración del entrenador.

El reto que tiene por delante Simeone  es tan exigente como estimulante. Consolidarse en el Atlético de Madrid y en la Selección Argentina son dos objetivos que requieren disciplina total. Su ambición por llegar al Mundial de 2026 convierte esta etapa en la más ambiciosa de su corta, pero prometedora, carrera deportiva.