La reciente derrota del Atlético de Madrid por 4-0 ante el Benfica en la Champions League ha desatado una ola de críticas y preocupaciones entre la afición colchonera. En este contexto, Kiko Narváez ha expresado su análisis sobre la situación actual del equipo, destacando los problemas que, a su juicio, están impidiendo que el Atlético alcance su máximo potencial.
Kiko intervino en ElDesmarque
Durante su participación en 'ElDesmarque Madrugada', Kiko Narváez no dudó en señalar que el equipo atraviesa un momento complicado. "Es un quiero y no puedo", afirmó, enfatizando que los defectos que el Atlético ha mostrado en partidos anteriores están repitiéndose. Este diagnóstico resuena entre los seguidores, quienes sienten que el equipo no está rindiendo al nivel que se esperaba.
Narváez también mencionó que Simeone tiene mucho trabajo por delante para conseguir que el equipo funcione como una unidad cohesiva. "No termina de hacer la estructura", indicó, refiriéndose a la falta de un sistema definido que permita a los jugadores destacar en sus respectivas posiciones. Este aspecto es crucial, ya que la identificación de roles claros dentro del equipo puede ser determinante para el rendimiento en el campo.
Kiko tiene claro el problema
Uno de los puntos más críticos que tocó Kiko fue el uso de ciertos jugadores en posiciones que no les benefician. "Algunos jugadores están siendo desperdiciados en sitios que no les corresponde", comentó. En particular, citó a Julián Álvarez, a quien considera un delantero que se asocia mejor con una referencia en el centro del ataque. Verlo jugar en la banda izquierda le resulta desconcertante, ya que su capacidad para crear juego se ve limitada en esa posición.
El exjugador también criticó la falta de identificación con el estilo de juego del equipo. "No ha cogido el rollo a la plantilla y está haciendo pruebas en cada partido. No me termino de identificar", expresó. Esta sensación de desconexión no solo afecta al rendimiento en el campo, sino que también puede tener un impacto emocional en los jugadores.
Kiko Narváez es consciente de la historia del Atlético de Madrid y del orgullo que siente por el escudo. En su intervención, mencionó que, en duelos anteriores contra el Benfica, el equipo había salido perdiendo. En esta ocasión, no solo fueron superados, sino que los portugueses demostraron ser más inteligentes al aprovechar los errores del Atlético. "Les metieron cuatro, pero les podían haber metido seis o siete si no es por Giménez o Oblak", señaló.