El Atlético de Madrid encara un importante mercado de verano donde va a tener que cumplir varios objetivos para darle un buen salto de calidad a la plantilla. El último curso ha sido muy positivo, especialmente en el rendimiento de aquellos refuerzos que llegaron el pasado verano, aunque todavía falta otro calor. En el Metropolitano quieren acercarse a los grandes clubes de Europa y necesitarán cerrar la incorporación de grandes futbolistas.
Obviamente, es un proceso en el que muchos de los nombres que hay en la agenda rojiblanca se quedan por el camino, algo que ha sucedido en los últimos días. Desde el conjunto colchonero hace meses que vigilaban de cerca a una de las grandes promesas de España cuyo deseo era poder regresar a Europa. De hecho, lo hará, pero para vestir la camiseta del Oporto, equipo que está muy cerca de anunciar un acuerdo para hacerse con sus servicios.
Simeone planea un nuevo esquema
Un detalle llamativo en las últimas jornadas de LaLiga es que el Atlético de Madrid apostaba por salir de inicio con tres centrocampistas, algo novedoso. Habitualmente, el plan de Simeone era apostar por un doble pivote con Rodrigo de Paul y Pablo Barrios escoltados por dos extremos en las bandas. Sin embargo, aunque puede ser casualidad, parece que el Cholo estaría ensayando un nuevo esquema que pondría en práctica la próxima temporada.

En ese caso, el equipo rojiblanco necesitaría encontrar un pivote y un interior que tuviese más libertad a la hora de sumarse al ataque, una característica muy buscada. Por ello, hace ya algunos meses que desde el Metropolitano estaban muy pendientes de la evolución de Gabri Veiga, quien militaba en el Al Ahli de Arabia Saudí. El joven futbolista español estaba deseando regresar a Europa y el Oporto está cerca de anunciar su fichaje a cambio de 16 millones de euros.
Un viaje efímero al fútbol árabe
Gabri Veiga empezó a destacar desde su debut con el Celta de Vigo, protagonizando una gran temporada y llamando la atención de grandes clubes. De hecho, muchas informaciones situaban al Real Madrid como uno de los favoritos para ficharlo, aunque los planes del jugador eran diferentes. Se echó abajo su llegada al Nápoles para probar suerte en Arabia Saudí, donde ha vivido dos años muy fructíferos en el aspecto económico.
También ha logrado ser campeón de la Champions de Asia, siendo el momento ideal para volver a probar suerte en el viejo continente. El Oporto parece el mejor escaparate posible para volver al mapa y el Atlético de Madrid ya mira a otras opciones que puedan darle un rendimiento más inmediato. Todavía es joven, pues no se puede descartar que en unos años su nombre vuelva a estar ligado con el equipo rojiblanco o con cualquier otro gran conjunto.