El Atlético de Madrid debutará este domingo en el Mundial de Clubes en un encuentro de alto voltaje ante el PSG, reciente campeón de Europa. Los rojiblancos aterrizaron ayer en Los Ángeles para concentrarse en el hotel y empezar a entrenar con la vista puesta en su próximo choque. No hay muchas novedades en la lista de convocados de Simeone, más allá de la presencia de seis canteranos y el regreso de Carlos Martín.
Desde el club colchonero deslizan que no tienen ninguna prisa por cerrar refuerzos, aunque seguirán trabajando durante las próximas semanas. Esta nueva competición puede ser, además, un punto de inflexión para aquellos jugadores cuyo futuro todavía se mantiene en el aire. Algunos están en la rampa de salida y un buen rendimiento en Estados Unidos podría darles un hueco en la plantilla la próxima temporada.
Simeone confía en toda su plantilla
El Cholo ha dejado claro en recientes declaraciones que el objetivo del Atlético de Madrid es intentar ganar el título en suelo estadounidense. Para ello, contará con los mismos jugadores que han competido durante el pasado curso, teniendo momentos de gran nivel. Samu Lino es uno de los que afronta el Mundial de Clubes como una oportunidad de oro para intentar encontrar su mejor versión, algo que no es sencillo.

Su primera campaña como rojiblanco fue muy destacada, incluso siendo nombrado por los aficionados como el mejor jugador de todo el equipo. Más problemas ha tenido desde que Simeone cambió su esquema, además de la llegada de un Conor Gallagher que ha tenido un rendimiento notable. El brasileño puede aprovechar un torneo más corto para encontrar la regularidad y demostrar que todavía es una pieza útil en el conjunto colchonero.
El Atlético espera una revalorización
Otros futbolistas como Nahuel Molina y Rodrigo Riquelme van a tener más difícil poder brillar en el Mundial de Clubes, pues no parten como titulares. En el caso del canterano parece difícil que vaya a continuar otro año en el Metropolitano, teniendo ofertas de clubes de España y Europa. El caso del lateral argentino es más preocupante, pues parece difícil que vaya a recibir una oferta satisfactoria durante el mercado de verano.
Cualquiera de ellos podría llamar la atención de algún club en caso de aprovechar sus minutos sobre el terreno de juego, algo que no va a ser fácil. El Atlético de Madrid, afronta el grupo más complicado de toda la primera fase, disputando tres jornadas exigentes. Los rojiblancos no pueden relajarse en ninguno de los encuentros y eso obligará a todos a dar el 100% desde el primer día.