El Atlético de Madrid no detiene su actividad en este mercado de verano, inmerso en una reestructuración que afecta tanto a fichajes como a salidas. Con la llegada de Thiago Almada, el club ha sobrepasado el cupo de extracomunitarios. Una situación que obliga a tomar decisiones importantes en los próximos días para dar salida a algunos jugadores rojiblancos.
Uno de los nombres marcados en rojo por la dirección deportiva es el de Nahuel Molina. No solo por su condición de extracomunitario, sino también por su elevado valor de mercado y por el interés creciente que ha despertado en Italia.

El lateral argentino, campeón del mundo y titular habitual en el Metropolitano, podría ser la clave que permita al Atlético reforzar varias posiciones estratégicas. Especialmente el lateral derecho, donde ya se busca relevo en el Metropolitano.
La Juventus entra en escena y tantea un intercambio
Desde Italia, la Juventus ha sido el club que más firmemente ha mostrado su interés en hacerse con Molina. Según informa La Gazzetta dello Sport, el conjunto bianconero ya ha establecido contactos con el Atlético para conocer las condiciones del traspaso. El precio fijado por los rojiblancos oscila entre los 25 y los 30 millones de euros, una cifra que Turín considera elevada.
Ante ello, la Juventus ha puesto sobre la mesa varias alternativas para reducir el coste, como la inclusión de jugadores en la operación. Entre los ofrecidos están nombres de peso como Vlahovic, Weston McKennie o Nico González.
Sin embargo, ninguno de ellos termina de encajar en los planes del Atlético. Ya sea por razones económicas, encaje táctico o, en el caso de Nico, por volver a tropezar con el problema del pasaporte.
Donde sí podría haber sintonía es en la figura de Nícolo Savona, joven lateral derecho de 22 años e internacional sub-21 con Italia. El Atlético cuenta con informes muy positivos sobre su proyección y ve con buenos ojos una posible llegada que pueda reforzar la banda derecha de cara a la temporada 2025/26.
Salida estratégica para equilibrar fichas y reforzar el equipo
La venta de Nahuel Molina no es un deseo, pero sí una necesidad estratégica. Con ella, el Atlético no solo resolvería el problema de las fichas extracomunitarias, sino que también ganaría margen económico para cerrar otras operaciones prioritarias. Su salida podría desencadenar un efecto dominó en el mercado rojiblanco.