A lo largo de los años, ha habido varios modelos de la camiseta del Atlético de Madrid, pero las variaciones han sido históricamente más estéticas que de calado. Los cambios más profundos suelen dividir más entre gente a la que le gusta la innovación estética y a la que no tanto. Abundan los anagramas impresos por la conmemoración de algún evento, como el pasado campeonato de Liga o la despedida de Fernando Torres en 2018.
No solo eso. Pese a que el Atleti no es el único equipo rojiblanco de España, prácticamente ha monopolizado ese calificativo. Cuando uno piensa en los rojiblancos, aparece la imagen del Atlético de Madrid.
Sin embargo, como el origen y el nombre del club, el motivo de que la camiseta de los madrileños sea rojiblanca se encuentra en Bilbao. Como todo colchonero sabe, el nacimiento del Atlético se debe a que un grupo de estudiantes vizcaínos en Madrid, tuvo en 1903 la idea de formar un equipo de fútbol a imagen y semejanza del Athletic Club de Bilbao, el cual había sido fundado en 1898.
A su vez, el Athletic fue una herencia directa de los marineros ingleses que desembarcaron en los puertos vizcaínos a finales del siglo XIX. El fútbol nació en Inglaterra y el resto del mundo se limitó a disfrutar esa versión del deporte de pelota que enfrenta once contra once. En esa época de tradición inglesa se copiaron sobre todo los patronajes de los uniformes.
De hecho, en Inglaterra hay ocho equipos que visten camiseta de rayas rojas y blancas, y a lo largo de la historia ha habido más. Los rojiblancos originales son el Sunderland, pero también el Southampton, el Sheffield United y el Stoke City tienen una larga historia rojiblanca. A ellos se suman los equipos del Exeter City, Brentford, Lincoln City y Cheltenham Town.
La rojiblanca madrileña
En otros países también hay rojiblancos, por ejemplo, en Holanda con el PSV Eindhoven, donde la empresa Philips importó el fútbol para que sus empleados se entretuviesen. Al Atlético de Madrid, la camiseta rojiblanca también le llegó de importación, pero no como primera opción.
En un principio, el Athletic de Bilbao y, en consecuencia, también el Atlético de Madrid, que era una entidad afiliada con sede en Madrid que compartía algunos directivos y jugadores, vestían con la misma camiseta que el Blackburn Rovers, a quienes los vascos directamente compraban la vestimenta cuando viajaban a Inglaterra. Esas camisetas eran mitad blancas y mitad azules, un uniforme que un par de décadas después adoptaría, hasta la actualidad, el Alavés.
Sin embargo, en 1911, el delegado de los clubes españoles no pudo conseguir las equipaciones deseadas. Entonces, teniendo en cuenta que era un viaje muy costoso, para no volverse con las manos vacías, compró las camisetas al Southampton que, como hemos mencionado, viste de rojiblanco. A partir de ahí, los dos equipos, Athletic y Atleti, vistieron camiseta rojiblanca, aunque los madrileños conservaron el calzón azul para distinguirse de los bilbaínos. ¡La versión más romántica de esta historia conecta la historia del Atlético y Athletic con la del Titanic, incluso!
Los otros rojiblancos
Podría pensarse que la conexión inglesa también se aplica al resto de equipos españoles “rojiblancos”, pero no es del todo así. Granada es famosa por sus grandes edificaciones como la Alhambra, la Catedral u otras menos conocidas, pero también interesantes, como el elegante Admiral Granada con muchas opciones de ocio, y también por costumbres estupendas, como la querencia por ir de tapas o escuchar flamenco en el Albaicín. Conocemos su pasado árabe, pero ¿inglés? Aquí no hay ningún “Athletic” ni “Sporting” Club.
Y es que la historia del uniforme granadino es similar a la del equipo madrileño de la Ribera del Manzanares. En los inicios de lo que era el Club Recreativo Granada, se fueron cambiando los colores un poco por necesidad, atendiendo a lo que podían conseguir. En 1939, el equipo vestía a rayas azules y blancas, pero, cuando un directivo fue hasta Madrid para comprar la equipación, lo único que pudo encontrar fueron unas camisetas del Atlético de Madrid que estaban a la venta.
El Granada viste de rojiblanco por el Atleti
Ese año, el equipo cambió el nombre a Granada Club de Fútbol y vistió de rojiblanco. Hay que apuntar que, en 1973, en una avanzada acción de marketing del entonces presidente (para que les compraran camisetas) cambió el sentido de las rayas, y desde entonces, son horizontales.
En el caso del Sevilla, sí que encontramos una historia muy similar a la del Athletic y el Atleti. Pese a que no sea ciudad de puerto, tanto en Sevilla como en Cádiz y Huelva se hacían muchos negocios con empresas inglesas a finales del siglo XIX. Los directivos del Sevilla FC tenían relación con la empresa naviera MacAndrews, de la ciudad de Sunderland -los pioneros rojiblancos-, y fue a su equipo al que encargaron las camisetas para vestir a los sevillanos.
Quienes no tuvieron que adoptar los colores de nadie fueron los asturianos. El Sporting de Gijón siempre ha mantenido su camiseta, que es la rojiblanca más antigua de España. Y tampoco es que se “copiasen” de los ingleses; simplemente, da la casualidad de que los colores del escudo de Gijón son el rojo y el blanco.