En la rueda de prensa previa al choque del Atlético de Madrid contra el PSG, Rodrigo De Paul aprovechó para responder a las críticas y pitos recibidos. Lejos de mostrarse afectado, el mediocampista argentino mostró una actitud positiva y comprensiva ante las exigencias de los hinchas. Interpretó los silbidos como un llamado a mejorar y demostrar su mejor versión sobre el césped.
"Está bien que me exijan, significa que puedo dar más"
En relación a los pitos que ha recibido en el Metropolitano, De Paul no solo demostró autocrítica, sino que se mostró agradecido por la presión que ejerce la afición rojiblanca. “Ellos están en todo su derecho de exigirnos y yo intento dar lo mejor. Entiendo las exigencias de este club; el Atlético de Madrid es muy grande y, en cada partido, la gente espera que demos todo para ganar. Si me exigen, quiere decir que creen que puedo dar mucho más”, comentó el argentino.
De Paul también destacó que esta presión le ayuda a no conformarse, permitiéndole mantener un nivel alto y competitivo. “Lo entiendo y, al final, es algo que nos hace mejores a todos. Si la gente nos pide más es porque saben que podemos mejorar. Estoy aquí para dar lo mejor y mejorar en cada partido”, añadió.
Confianza en el equipo y apoyo a Pablo Barrios
Además de hablar de su situación personal, Rodrigo de Paul también tuvo palabras para su joven compañero Pablo Barrios. El argentino mostró plena confianza en el centrocampista, señalando que el club tiene un gran futuro en sus pies. “Es un gran jugador y confiamos mucho en él, eso sí, no debe cargarse con todas las responsabilidades; para eso estamos los más veteranos del equipo. Me encanta que el Atlético siga sacando jugadores de su cantera que llevan en el ADN esta camiseta y el compromiso con el club”, señaló.
Rodrigo de Paul quiso cerrar su intervención con un mensaje de optimismo y compromiso hacia los seguidores del Atlético de Madrid. Según el mediocampista, la clave para superar los obstáculos y estar a la altura de las expectativas es “trabajar unidos” y no bajar los brazos en ninguna circunstancia. “Ojalá todos los partidos sean como el último, porque eso significaría que el esfuerzo vale la pena y que estamos dando alegrías a la afición”, concluyó De Paul.