En el Atlético de Madrid, la planificación del próximo mercado de fichajes ya empieza a perfilarse, y uno de los casos que más debate genera internamente es el de Nahuel Molina. Se trata de un jugador que pese a su estatus internacional, ha visto cómo su rendimiento ha caído notablemente. Según apunta Rubén Uría, este caso podría convertirse en paradigmático y marcar buena parte del verano rojiblanco.
Molina es un futbolista que, a juicio del periodista, ha mostrado un nivel flojo en los últimos tiempos. Sin llegar a cuestionar sus cualidades humanas ni su compromiso, la realidad es que su aportación sobre el terreno de juego ha sido muy inferior a la esperada. “Si hay un jugador cuyo rendimiento ha caído en picado, es él”, señala Uría, quien considera que su salida este verano debería ser una prioridad para el club.
Desde hace semanas, la dirección deportiva colchonera se ha movido activamente en el mercado, ofreciendo al jugador en media Italia, media Premier League e incluso en clubes franceses. Siempre con el objetivo de encontrar un destino que pueda asumir su salario y cerrar un traspaso beneficioso. El precio de salida, por ahora, se mantiene firme: entre 20 y 25 millones de euros.
Hace fuerza por quedarse
La intención del Atlético es clara, pero existe un obstáculo importante según Uría: el propio futbolista no desea salir. Según la información transmitida por el periodista, "El lateral está haciendo fuerza para quedarse en Madrid", rechazando la posibilidad de cambiar de aires. El club, mientras tanto, intenta convencerle de que lo mejor para ambas partes sería separar sus caminos este mismo verano.
Hay otro factor que complica el escenario, en cuestión de meses, el jugador podría obtener la nacionalidad italiana. Algo que evitaría que ocupará una de las tres plazas de extracomunitario, actualmente ocupadas por él mismo, Conor Gallagher y Thiago Almada. Esta circunstancia añade un punto importante, ya que liberaría un cupo para reforzar la plantilla con otro extranjero.
Uría no tiene dudas
La posición de Rubén Uría es tajante: “El Atlético tiene que dar salida a este jugador, y como diría Del Nido, es sí o sí. No puede estar en un Atleti de grandes aspiraciones”, zanjó. La idea es poder llegar a dar un gran salto de calidad en esa posición, pese a que ya se han reforzado con Marc Pubill para esa demarcación.
En definitiva, el futuro del lateral argentino parece ser uno de los focos principales del próximo mercado rojiblanco. El pulso entre la voluntad del jugador de seguir y el deseo del club de vender marcará las próximas semanas. El desenlace dependerá de si aparece una oferta lo suficientemente atractiva como para convencerle, o si finalmente el Atlético debe replantearse sus planes y contar con él una temporada más