El Atlético de Madrid se prepara para un verano movido en los despachos. Tras una temporada irregular, el club rojiblanco se plantea una profunda renovación de su plantilla, y según ha revelado el periodista Rubén Uría, los recursos económicos no serán un problema. En su canal de Twitch ha asegurado que "hay dinero para fichar y margen de mejora", gracias en gran parte a la reciente renovación del acuerdo de patrocinio con Nike.
Seis prioridades para construir un nuevo Atlético
Rubén Uría ha desvelado que la dirección deportiva del Atlético de Madrid tiene muy claro su plan de acción para el mercado de verano. Existen seis posiciones consideradas prioritarias por el club. La primera de ellas es la del lateral izquierdo, donde ya se manejan nombres como Miguel Gutiérrez y Álvaro Carreras, dos jugadores jóvenes y con gran proyección. A esta necesidad se suman dos fichajes clave en el eje de la defensa, pues el Atlético quiere incorporar a dos centrales de nivel europeo.

En el centro del campo también se prevén dos incorporaciones. La idea es fichar a un mediocentro de trabajo, físico y con recorrido, y a otro más creativo, que pueda marcar diferencias. El último gran objetivo es un delantero, aunque no se descarta que lleguen dos si finalmente Antoine Griezmann o Ángel Correa abandonan el club. La intención es reforzar la punta de ataque con jugadores más jóvenes, dinámicos y con capacidad de adaptación al estilo de Simeone.
Más allá de las prioridades: alternativas y nuevas oportunidades
Además de estas seis posiciones clave, el Atlético de Madrid también contempla otros movimientos dependiendo de cómo avance el mercado. Uría ha explicado que existe un segundo nivel de necesidades, donde figuran un lateral derecho que pueda dar descanso a Marcos Llorente. En todos los casos, la premisa será clara: solo llegarán futbolistas que mejoren la calidad del once titular.
Uno de los grandes interrogantes del verano será la portería. Aunque no es la prioridad número uno, el futuro de Jan Oblak sigue siendo incierto. En este contexto, el nombre de Joan García está encima de la mesa de la dirección deportiva.
El equilibrio económico, clave en la hoja de ruta
A pesar del músculo financiero que aporta el nuevo contrato con Nike y otros patrocinios, Rubén Uría ha sido claro al afirmar que no habrá "barra libre". El Atlético de Madrid no se saltará las reglas financieras impuestas por la UEFA y trabajará con un límite claro: el gasto en salarios no puede superar el 70% del presupuesto. En ese marco, se espera la salida de entre siete y ocho futbolistas y la llegada de seis o siete incorporaciones.

El club rojiblanco no solo busca bajar la edad media de la plantilla, sino también aligerar la masa salarial. La estrategia es clara: menos fichajes, pero de más nivel. El mensaje que llega desde la cúpula es rotundo, tal como lo expuso Uría: “Mejor tres o cuatro muy buenos que diez de relleno. Eso en el club lo tienen muy claro”.