Primera derrota del Atlético de Madrid en más de un año en el Metropolitano, precisamente ante su último verdugo como local. Los rojiblancos salieron en busca de la victoria desde el primer minuto, mostrando una presión alta. Sin embargo, poco le hizo falta al conjunto azulgrana para batir la portería de Jan Oblak.
El conjunto colchonero se complica su clasificación a la próxima edición de la Champions League tras esta derrota. El Athletic Club ganó al Deportivo Alavés y ya le ha arrebatado la cuarta plaza al equipo de Simeone.
El MVP
El jugador que nunca dejó de intentarlo en la banda izquierda rojiblanca fue Samuel Lino, quien ya fue titular ante el Inter de Milán. El brasileño fue una auténtica pesadilla para Kounde, buscando siempre área contraria y generar peligro. Sin embargo, no terminó de encontrar a un compañero dentro del área, algo que dificultaba a los colchoneros marcar gol.
La sorpresa
Uno de los que contó con una oportunidad de oro sobre el terreno de juego fue Ángel Correa, quien ya tuvo minutos ante el Inter. El atacante rojiblanco hizo tridente de ataque junto a Memphis Depay y Antoine Griezmann. Tuvo buenas acciones en la derecha, combinando siempre de la mejor manera con Nahuel Molina.
A pesar de ser uno de los jugadores que más cambia su posición sobre el terreno de juego, Ángel Correa mostró un gran nivel. Siempre apostó por la presión alta y supo moverse siempre entre líneas para sorprender los jugadores del Barça. Solamente le faltó haberse atrevido más de cara a puerta, aunque fue uno de los más activos durante todo lo encuentro.
Necesita mejorar
Reinildo tuvo un partido para olvidar, siendo muy superado en la banda izquierda durante todos los ataques del Barcelona. Simeone le cambió de central a lateral, pero tampoco terminó de atreverse a la hora de incorporarse el ataque. El defensor mozambiqueño tuvo demasiados problemas para defender su espalda, dejando mucho espacio para correr a los azulgranas.
El partido de Simeone
El técnico argentino apostó por muchos cambios tras la victoria ante el Inter de Milán del pasado miércoles, aunque no le salió cara. El equipo que dispuso sobre el terreno de juego no término de responder a la exigencia de un partido grande. De hecho, tuvo que cambiar su esquema cuando el FC Barcelona se puso con dos goles de ventaja sobre el equipo rojiblanco.
Los cambios no terminaron de responder a lo que pedía el partido, dando muchas facilidades a loa blaugrana para poder correr. La presión alta de la primera mitad no se pudo ver tras el descanso, dando muchas facilidades a la defensa del Barça. Mucho que mejorar durante el parón de selecciones, pues el Atlético deberá viajar a Villarreal el próximo 1 de abril.