El Atlético de Madrid ha puesto punto y final a un mercado de fichajes en el que ha invertido más de lo esperado. El club rojiblanco considera que la plantilla está prácticamente cerrada y que no hay margen económico para más operaciones importantes. La realidad es que el técnico argentino Diego Pablo Simeone mantiene una postura firme: quiere más jugadores y, en especial, un futbolista que aporte desborde en el uno contra uno.
El “Cholo” entiende que su plantilla tiene calidad, pero no ve suficientes alternativas en las bandas. Reclama un regateador que elimine los rivales y de profundidad, algo que a su juicio le falta al equipo para competir al máximo nivel en todas las competiciones. Sin embargo, desde la directiva recuerdan que ya se ha realizado un esfuerzo notable en fichajes y que el límite financiero es estrecho.
Algunas fuentes cercanas al club explican que, a pesar de las intenciones de Simeone, no habrá más incorporaciones. El Atlético confía en que el bloque actual sea competitivo y en que jóvenes como Lino o Riquelme den un paso adelante. La dirección deportiva se da por satisfecha, aunque el técnico no oculta que hubiera deseado otro desenlace en este mercado.
El Sevilla, hundido en la tabla y con urgencias en el mercado
En la capital andaluza, la situación es muy distinta, con dos derrotas en las dos primeras jornadas de LaLiga. El equipo hispalense es uno de los colistas de la clasificación y las sensaciones no son positivas. El equipo necesita un golpe de efecto y caras nuevas que aporten jerarquía, el equipo de Matías Almeyda necesita cambios urgentes.
El gran problema es que el club atraviesa dificultades económicas severas. Apenas cuenta con fichas profesionales disponibles y su margen de maniobra en el mercado es muy limitado. Los dirigentes del Sevilla buscan soluciones rápidas, especialmente en el mercado de jugadores libres, la única vía viable para reforzar a un equipo en crisis.
La dirección deportiva sabe que necesita perfiles experimentados que puedan asumir responsabilidades desde el primer día. La afición, que comienza a impacientarse, exige un cambio inmediato. El vestuario reclama líderes dentro y fuera del campo y, en este contexto, el Sevilla ha encontrado una oportunidad inesperada en un veterano de prestigio.
Azpilicueta, fichaje sorpresa y nuevo líder del Sevilla
Ese jugador no es otro que César Azpilicueta. El defensa navarro, que acaba de desvincularse del Atlético de Madrid tras una etapa breve, aterriza en el Sánchez-Pizjuán con la misión de ser uno de los referentes del nuevo proyecto. A sus 36 años, Azpilicueta mantiene intacto su carácter competitivo y llega libre para firmar por una temporada con el conjunto andaluz.
El exjugador de Osasuna, Olympique de Marsella, Chelsea y Atlético será uno de los capitanes del vestuario de Matías Jesús Almeyda. El técnico valora su experiencia internacional y su capacidad para liderar en momentos de dificultad. Sevilla necesita precisamente eso: veteranía, disciplina y voz de mando, Azpilicueta aporta todo ello y se convierte en una incorporación estratégica.
El navarro estuvo cerca de regresar a Osasuna, su club de origen, pero finalmente ha elegido el reto sevillista. En un momento crítico, el Sevilla gana un líder, un futbolista que puede sostener al equipo en defensa y que, además, simboliza la esperanza de un vestuario necesitado de referentes. Su llegada se convierte en una de las noticias del mercado y en un rayo de luz para un club que vive horas muy complicadas.