Uno de los aspectos más positivos que se están valorando en el Atlético de Madrid es que la mayoría de los refuerzos han sabido adaptarse al estilo Simeone. Desde la dirección deportiva eran conscientes de que el verano iba a suponer una auténtica revolución en la plantilla, sufriendo numerosos cambios. Muchos jugadores se han marchado y han tenido que ser sustituidos por nuevos fichajes de calidad que pudiesen hacerse con la titularidad.
Ahora mismo, hay cinco caras nuevas que han sido capaces de ganarse un puesto en la alineación y que dejan buenas impresiones en los aficionados. Sin embargo, el objetivo del Cholo es que todos los recién llegados empiecen a sumar, ya sea de inicio o saliendo desde el banquillo, una tarea nada sencilla. De hecho, no son pocos los hinchas que están pidiendo al técnico que empiece a darle más oportunidades a una de esas incorporaciones.
Confianza en los fichajes
Sin duda, el mercado veraniego de Atlético ha ido de más a menos, concretamente desde que no se logró llegar a un acuerdo para fichar a Enzo Millot. El extremo francés era el favorito para reforzar el centro del campo, pero los métodos de pago no convencían al Stuttgart. Antes, habían llegado jugadores de mucho nivel como Baena, Almada o Cardoso, todos ellos titulares desde el primer momento.

Más dudas existen con Raspadori y Nico González, dos piezas que muchos entienden que no eran prioritarias para la planificación deportiva. El delantero italiano es del gusto de Simeone y ha contado con varias oportunidades desde su llegada, algo que también espera el ex de la Juventus de Turín. Sin embargo, una de las mayores incógnitas que existen es Marc Pubill, quien todavía no ha tenido la oportunidad de debutar en un partido oficial.
Un defensa todoterreno
En principio, fue fichado para ocupar el lateral derecho, pues se estaba buscando una salida para Nahuel Molina, algo que no fue posible ante la negativa del jugador. El campeón olímpico aceptó desde el día de su presentación que podía verse obligado a actuar como central en un equipo con problemas en defensa. Su 1.90 metros de altura dan mucha confianza a un Simeone que sabe de la irregularidad física de un Josema Giménez que sigue sin entrenar.
Además, Marcos Llorente no ha empezado la temporada a su mejor nivel, recibiendo varias críticas y siendo uno de los señalados tras el mal arranque liguero del equipo. Tras el parón, y con un calendario cargado de encuentros exigentes, podría ser una oportunidad de oro para que Pubill demuestre su nivel y empiece a pelear por la titularidad. Es una de las grandes promesas del fútbol español y espera su debut con el Atlético con la confianza de demostrar todo su potencial.