El Atlético de Madrid ya piensa en el futuro de su portería, y Diego Simeone ha señalado un nombre con claridad: Leo Román. El portero del Mallorca se ha convertido en el principal objetivo para reforzar una demarcación que, aunque bien cubierta, necesita empezar a planificar el relevo de Jan Oblak.
El Atlético de Madrid elige portero
A sus 24 años, Leo Román ha demostrado que está preparado para dar el salto. No ha sido titular habitual en el Mallorca, pero cuando le ha tocado jugar, ha respondido con actuaciones de mucho nivel. Sus partidos ante Barcelona y Real Madrid fueron una carta de presentación impecable. Paradas de mérito, seguridad bajo palos y personalidad en escenarios de máxima exigencia.

Aunque tiene contrato hasta 2026, su cláusula ronda apenas los diez millones. El Atlético considera que el fichaje podría cerrarse por una cifra cercana a los seis o siete millones de euros, lo que lo convierte en una operación asequible. Según AS, su valor de mercado sigue subiendo, y por eso quieren adelantarse a otros equipos de España, Italia e Inglaterra que también lo tienen en el radar.
Gusta en el club
En la dirección deportiva del Atlético gustan los perfiles como el de Leo Román: joven, con margen de mejora, experiencia en Primera y capaz de competir por el puesto. Aunque Oblak tiene contrato hasta 2028, su continuidad no está garantizada a medio plazo. A sus 32 años, su nombre vuelve a sonar en Arabia, donde ya han preguntado por su situación.
La comparación con Joan García, también en la órbita rojiblanca, es inevitable. Sin embargo, Joan García parece que jugará en la Premier League o en el Barcelona, pues su fichaje por el Atleti se ha enfriado. Por ello, Leo Román aparece como una opción perfecta para el presente y el futuro del club rojiblanco que se va preparando para la salida de Jan Oblak.
Por ahora no se han producido contactos oficiales, pero el final de temporada activa los movimientos. En el Atlético se entiende que es el momento perfecto para iniciar negociaciones, y en Mallorca ya se preparan para una salida que ven inevitable.