El Atlético de Madrid se encuentra en un momento de cambios y movimientos clave, no solo dentro del campo, sino también en los despachos. Mientras los rumores sobre la posible venta del club continúan flotando en el aire, Gil Marín ha tomado decisiones que podrían marcar el futuro del Atlético en los próximos años. En este artículo analizamos los últimos movimientos de Marín y lo que podrían significar para la institución rojiblanca.
El papel de Gil Marín en el Atlético de Madrid
Gil Marín ha sido, desde hace años, una pieza clave en la estructura del Atlético de Madrid. Su influencia es indiscutible, tanto dentro como fuera del campo. A diferencia de su socio, Enrique Cerezo, Marín ha gestionado las finanzas y la estrategia deportiva del club, tomando decisiones cruciales sobre fichajes, renovaciones y acuerdos comerciales. Aunque la figura de Cerezo suele acaparar los titulares, Gil Marín se ha convertido en el verdadero artífice de la estabilidad económica y la expansión internacional del club.
Uno de sus logros más recientes es el acuerdo con Riyadh Air, una aerolínea árabe que ha conseguido el patrocinio del estadio, lo que representa una fuente importante de ingresos. Este acuerdo ha sido un éxito rotundo para Gil Marín. Se mostró extremadamente satisfecho con la firma de un contrato de 250 a 300 millones de euros entre 2024 y 2033.
Rumores de venta: ¿qué está pasando realmente?
Recientemente, una reunión entre Gil Marín y emisarios de un fondo de inversión chino reavivó los rumores sobre la venta del Atlético de Madrid. Según fuentes cercanas al club, algunos han interpretado este encuentro como un primer paso hacia la posible venta del club. Sin embargo, desde el entorno de Gil Marín se descarta que esta operación se vaya a materializar a corto plazo.
Aunque Marín ha hablado en varias ocasiones de la posibilidad de vender sus acciones, su objetivo parece ser hacer una venta progresiva y no inmediata. De hecho, hace poco reconoció que su paquete accionarial no es un bien hereditario y que, en el futuro, podría deshacerse de sus participaciones. Sin embargo, es probable que, en el caso de que decida vender, Gil Marín mantenga su puesto como consejero delegado, mientras que Enrique Cerezo seguiría al frente del club como presidente.
El favorito para adquirir el control del club a largo plazo es el fondo norteamericano Ares, que ya posee una parte significativa del Atlético de Madrid a través de Atlético HoldCo. Esto podría marcar el inicio de una nueva era en la gestión del club, pero no se espera que se produzca en el corto plazo.